Con una ligereza increíble surgen comentarios sobre una supuesta desactualización de conocimientos sufrida por entrenadores que no han dejado de ser exitosos. La falta de indagación y la facilidad para lanzar cuestionamientos con poca o nula información generan mentiras verdaderas que pasan a ser repetidas en cada esquina donde se habla de fútbol. “La posible llegada de Hernán Darío Gómez sería retroceder”, opinan unos cuantos. La teoría se basa simple y sencillamente en que ya estuvo por acá, aunque también se refuerza la idea con el hecho de que el “Bolillo” no saltó nunca el charco (de Sudamérica a Europa).

De su parte, el técnico colombiano que nos llevó por primera vez a un Mundial responde con resultados que no pocos entrenadores quisieran en su palmarés. Repitió el milagro que obró con Ecuador al frente de la débil selección de Panamá, que a diferencia de la “Tricolor” sí estará en la cita de Rusia 2018. Gómez figura en la lista de los entrenadores que más han dirigido un Mundial. Con tres ediciones está en el mismo escalón de Mario Zagallo, Luiz Felipe Scolari, Guus Hiddink, Joachim Löw y José Pekerman. Nada más.

Su trabajo y el de sus sucesores y coterráneos (Luis Fernando Suárez y Reinaldo Rueda, todos duramente criticados) avalan su regreso. Hablar de errores, defectos o malos resultados es buscar una clara intención de quedarse con los aspectos negativos, que son menos que los positivos, y no dar el valor que se merecen dos grandes técnicos.

Así como “Bolillo” hizo historia a nivel de selecciones aquel 7 de noviembre de 2001, Edgardo Bauza hizo lo propio con un club. También consiguió lo que -hasta 2008- había sido imposible: conquistar la Copa Libertadores de América. El “Patón” levantó a un plantel que andaba mal, sugirió refuerzos y luchó contra marea al punto de salir escondido en la cajuela de un auto para evitar una agresión. Con LDU hizo realidad el sueño que no han logrado otros clubes ecuatorianos y le dio grandeza a un equipo que no tenía el reconocimiento de ahora en Sudamérica. Llegó a la final del Mundial de clubes, ganó la Recopa Sudamericana 2010, y como “Bolillo” repitió hazaña con otro cuadro: San Lorenzo. ¡Y así creemos que no son buenos candidatos! (O)