Para Eirik Vold, periodista, escritor e investigador noruego, experto en geopolítica internacional y autor del libro ‘Ecuador en la Mira’, un político que conspira contra un gobierno “jamás podría aspirar a tener ningún cargo de elección popular, o un cargo de poder en el país”.

Al ser entrevistado por Xavier Lasso, en el programa Palabra Suelta, transmitido la noche del miércoles por la Televisión Pública, Vold expuso con documentos los objetivos e intereses de Estados Unidos (EE.UU.) en Ecuador y el contacto que mantenía con políticos.  “Lo que se está hablando es de cómo influenciar para presionar, obligar al gobierno a retroceder en sus políticas democráticamente decididas, o están digamos, compartiendo estrategias de cómo derrocarlo o cualquier cosa, que la gente saque sus propias conclusiones”.

Y agregó que “eso no se considera legitimo en mi país, jamás en la vida, eso no sería aceptable y un político que por ejemplo, digamos, yo no tengo nada contra Rusia, pero en un momento en que las relaciones entre Noruega y Rusia no son favorables, si un político noruego estuviera conspirando con los rusos, en el supuesto hipotético de cómo influenciar o manipular al gobierno, jamás podría aspirar a tener ninguna cargo, puede aspirar a tener un cargo en la cárcel, pero a tener un cargo de elección popular, a tener un cargo de poder en el país, obviamente que no. Automáticamente se lo descalificaría”.

En el libro, el autor expone uno de los cables que fue escrito por la embajadora estadounidense en Quito entre 2002 y 2005, Kristie Kenney, quien relata cómo se dio la reconfiguración del Congreso, donde el partido de Andrés Páez, la ID, era parte de una nueva mayoría.

A la diplomática le preocupaba  la posible inestabilidad que podría causar una correlación de fuerzas y alianzas legislativas, pero veía positiva la presencia de Páez, que según Kenney ya había establecido una relación especial con la Embajada.

“Sin embargo, vemos algunos potenciales puntos positivos en la reorganización. Andrés Páez es un contacto cercano y respetado. Vemos buenas posibilidades para trabajar con él en el frente laboral; él es uno de los pocos miembros del Congreso que ha seguido activamente las negociaciones del FTA (Tratado de Libre Comercio) hasta la fecha y ha estado apoyando nuestra agenda”, señala el cable enviado desde Quito el 1 de junio de 2015, que se lo puede encontrar en https://wikileaks.org/plusd/05QUITO1255_a.html. (I)