Con la consigna “Dalo y Aguilar, vamos a ganar”, el Salón de la Democracia del Consejo Nacional Electoral se llenó ayer de banderas y globos amarillos y rojos. Miembros de Fuerza Ecuador (FE)  asistieron a registrar el binomio Dalo Bucaram-Ramiro Aguilar.

Abdalá Bucaram Pulley anunciara el viernes pasado, por Twitter, que su compañero a la candidatura sería Aguilar. Ayer se inscribió oficialmente ese binomio.

Aguilar, en 2013, llegó como asambleísta con el movimiento SUMA, del alcalde de Quito Mauricio Rodas. Después se proclamó independiente y últimamente fue propuesto por miembros del Partido Social Cristiano (PSC) para binomio de Cynthia Viteri. Sin embargo, finalmente se unió a Dalo, hijo del defenestrado Abdala Bucaram Ortiz, del exPRE.

Aguilar apoya a Dalo porque es un “político joven” y porque “yo soy un hombre maduro que entiendo a aquellos ecuatorianos que junto con los jóvenes queremos construir un mejor Ecuador”. De allí que resaltó: “Dalo, confío en ti, sé que eres un hombre con una hoja de vida intachable, lo demás es la mentira de quienes no le dicen la verdad al pueblo”.

FE también oficializó ayer la candidatura a asambleísta nacional de la periodista y expresentadora de televisión María Mercedes Cuesta, En segundo puesto de candidatos a legisladores nacionales se inscribió a Carlos Luis Juez Zambrano.

Para la legislatura por Pichincha FE postuló a César Rodríguez, quien en julio de 2011 abandonó las filas de AP y pasó a la oposición. Luego apareció como secretario del movimiento Juntos Podemos, que primero apoyaba la candidatura presidencial de Paúl Carrasco (prefecto del Azuay) y luego la de Viteri a través de la exUnidad, coalición política liderada por el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot.

Para saber qué motivó su salida de Juntos Podemos, este Diario llamó ayer en varias ocasiones al celular de Rodríguez, pero no se obtuvo respuesta.

El exgeneral de la Policía Nacional, Juan Ruales, también será candidato a asambleísta. En su intervención, indicó ayer que se postula por FE porque quiere defender el honor de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas, “que han sido mancilladas”. (I)