El retiro del asilo a Assange se ampara en Derecho
El Gobierno ecuatoriano retiró el asilo concedido a Julian Assange el 19 de junio del 2012, de acuerdo al Derecho Internacional.
La explicación gubernamental se sustenta en las constantes violaciones del fundador de WikiLeaks a las normas establecidas en la Convención sobre asilo diplomático, firmada en La Habana el 20 de febrero de 1928, y la de Caracas, en marzo de 1954.
Esto subrayó el canciller José Valencia el jueves 11 de abril, durante su comparecencia en la Asamblea, para explicar los motivos de la medida.
Valencia señaló que la situación en la embajada de Ecuador en Londres se volvió insostenible por el comportamiento agresivo de Assange, quien golpeó en diferentes ocasiones a guardias de seguridad del consulado.
Esa conducta obligó al Gobierno a emitir un Protocolo de Convivencia para garantizar el bienestar de los funcionarios de la delegación diplomática y el respeto a los Derechos Humanos del asilado.
Sin embargo, el comportamiento de Assange empeoró y siguió interviniendo en asuntos internos de otros países. Por ejemplo, se inmiscuyó en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de octubre del 2016, en las elecciones presidenciales de Ecuador en 2017, en la situación política de Cataluña en España e incluso en la publicación de documentos internos de El Vaticano.
La mala conducta del hacker llegó al extremo de manchar las paredes de la embajada con residuos fecales. Además, se paseaba desnudo por los pasillos de la Embajada, orinaba fuera de la habitación y corría en patineta.
Tampoco se aseaba ni limpiaba los restos de comida de su gato. Todo esto ponía en peligro no solo a los trabajadores sino a los visitantes de la sede diplomática.
Assange señaló que el Gobierno de Ecuador actúa por instrucciones de potencias extranjeras y profirió insultos en contra del embajador del país en la capital británica.
Ese irrespeto es uno de los motivos que empujó al Gobierno ecuatoriano a retirarle el asilo. La Convención de La Habana estipula que el asilo de delincuentes políticos será respetado en la medida en que lo permitan las convenciones o las leyes del país de refugio. “Mientras dure el asilo no se permitirá a los asilados practicar actos contrarios a la tranquilidad pública”, señala esta convención en el artículo 2.
La Convención de Caracas estipula que “el funcionario asilante no permitirá a los asilados practicar actos contrarios a la tranquilidad pública, ni intervenir en la política interna del Estado territorial”.
El canciller Valencia también anunció que los efectos de la nacionalidad ecuatoriana otorgada a Assange fueron suspendidos, debido a irregularidades que constituyen un acto administrativo lesivo.
El 12 de diciembre de 2017, el entonces viceministro de Movilidad Humana (e), José Jácome Guerrero, suscribió la Carta de Naturalización de Assange, quien nació en Townsville, Australia, el 3 de julio de 1971.
María Fernanda Espinosa, quien se desempeñaba como canciller de la República en ese entonces, informó sobre este tema. Según analistas, ella creyó que si le otorgaban la nacionalidad a Assange podían ofrecerle un cargo diplomático y así sacarlo de la embajada en Londres y del Reino Unido.
Pero la iniciativa fracasó porque Londres no aceptó la decisión unilateral de Ecuador y advirtió que lo detendría en cuanto saliera de la legación diplomática.
Juan Sebastián Roldán, secretario de la Presidencia, indicó que la nacionalidad de Julian Assange está en revisión. Roldán explicó que comenzó un proceso de investigación sobre este asunto, lo que toma tiempo.
Aseguró que no pueden quitarle la nacionalidad a Assange de un día para el otro, pero se está siguiendo el procedimiento legal correspondiente. (I)