La exasesora presidencial no solo estaba atenta a los casos judiciales, a ella también le llegaban las propuestas de contratos para el Gobierno.

Eso ocurrió el 13 de septiembre del 2014, cuando Héctor Villagrán le remitió un mensaje pidiendo su gestión para que el representante de Sinopec, Li Hao, se reuniera con autoridades del Estado.  

Pamela M. solo le ofreció llevar el mensaje ante su jefe; pero luego le explicó que no tuvo respuesta. Algo parecido sucedió con una solicitud del exsecretario del Agua, Walter Solís, quien le pidió recibir a un empresario que necesitaba que le gestionaran un pago atrasado.

Pamela M. recibió a ese empresario y le consultó si en verdad requería que se lo ayudara o solo se quedaba en la reunión. Sin embargo, Solís le respondió que este empresario estaba dispuesto a seguir “colaborando”.

En los chats recuperados por la Policía de Criminalística también están conversaciones con el exejecutivo de Odebrecht en Ecuador, Gerardo de Souza, sobre la intención que tenía la empresa brasileña en los contratos para la refinería del Pacífico y para el puerto de Manta.    

En el primero consiguieron trabajar en el aplanamiento del terreno; en el segundo no estuvieron. (I)