En un mensaje a la Nación, el presidente de la República, Rafael Correa, anunció esta noche que para evitar que ciertos grupos opositores "provoquen más violencia" retirará temporalmente los proyectos de las denominadas leyes de herencias y plusvalía, "hasta que se agote el debate".

Recalcó, sin embargo, que cree profundamente en que los mencionados proyectos benefician a los ciudadanos. También dijo que si logran demostrar que estas normativas afectan a la clase media y pobres, las archivará definitivamente.

En su mensaje, el Mandatario lamentó que el país esté "viviendo días de gran intraquilidad, con grupos opositores extremadamente agresivos".

Correa subrayó que "en democracia todos tenemos derechos a manifestarnos, pero nadie tiene derecho a la violencia". Y dirigiéndose a los ciudadanos, especialmente a los jóvenes, el Mandatario recalcó que el "gran pecado social de nuestra América es la injusticia".

"Nos llamamos un continente de paz, pero la insultante opulencia de unos pocos en América Latina, a lado de la más intolerable pobreza, son también balas cotidianas en contra de la dignidad humana", agregó el Jefe de Estado. Dijo que le ha provocado tristeza "leer en redes sociales mensajes de jóvenes de nuestra burguesía, defendiendo sus potenciales herencias, insultando a los que no pudieron acumular, a los que no pudieron dejarles nada material a sus hijos".

"Los pobres no son pobres por tontos o por vagos, como se ha dicho en estos días", aclaró el Mandatario, sino "por una sociedad tremendamente injusta, que produce y reproduce profunda desigualdad de oportunidades desde el inicio de la vida".

Correa recordó que después de la crisis económica de 1999, "al país no lo salvaron los ricos, sino los pobres, nuestros migrantes" con sus divisas.

En el mensaje, el Jefe de Estado insistió en que la Ley Orgánica para la Redistribución de la Riqueza (Herencias), grava de forma progresiva el patrimonio heredado, evitando las formas de evasión que actualmente existen. Indicó que este proyecto es tan importante que lo considera equivalente a la reforma agraria de los 60, pues cambiará la estructura de la propiedad sobre todos los medios de producción en el país.

El segundo proyecto, manifestó, es para gravar las ganancias extraordinarias "fruto básicamente de la especulación con inmuebles". Esto produce la socialización de las pérdidas, el gasto en la inversión pública y la privatización de las ganancias.

"Buscan otro 30S"

Correa recordó que había anticipado que enfrentaría el costo político de estas medidas, pese a que solo afectan a una mínima parte de la población. Sin embargo, explicó, grupos opositores han generado una violencia "inusitada" y siguen intentando provocar incidentes. "Este nivel de insensatez es muy grave para la seguridad de los ecuatorianos, claramente buscan otro 30S", dijo al recalcar que no permitirá que ello vuelva a ocurrir.

El Presidente dejó en claro, sin embargo, que está "profundamente convencido" que los proyectos benefician a la inmensa mayoría de ciudadanos y que quienes lo desaprueban son los opositores de extrema derecha, grupos de presión y acaudalados personajes que sirven a intereses políticos y que buscan infundir "miedo".

"Para evitar que estos grupos provoquen más violencia, más aún cuando precisamos para la visita del papa Francisco un ambiente de paz, regocijo y reflexión para su recibimiento, he decidido retirar temporalmente los proyectos de ley mencionados", informó Correa. Al mismo tiempo invitó a "un debate nacional sobre las leyes en particular, pero en general sobre la clase de país que deseamos". Dijo que espera que participen la Asamblea, gremios, organizaciones sociales, la Academia, jóvenes, entre otros.

Explicó que todo esto se debió hacer en el Legislativo, pero que ha sido imposible con tanta desinformación y violencia generadas.

Correa manifestó que también debería debatirse las dos visiones de sociedad que están en disputa: la que legitima la acumulación limitada de riqueza y la minimización del Estado, satinazando instrumentos fundamentales de redistribución como los impuestos;  y la otra visión, la que representa la Revolución Ciudadana, que busca una sociedad más justa, un Estado adecuadamente redistribuidor.

Retiro de leyes es "hasta que se agote el debate"

"El tiempo también nos permitirá demostrar mentiras creadas. Si alguien me demuestra que algunas de las leyes afecta a los pobres o la clase media, archivaré definitivamente los proyectos. Si alguien logra demostrar que las leyes eran con fines recaudatorios por un supuesto despilfarro de fondos públicos, también archivaré definitivamente los proyectos", dijo Correa.

Pero, si por el contrario, indicó el Presidente, "se demuestra que todo esto fue mentira, los falsarios deberán responder ante la ciudadanía".

Correa explicó que el retiro de las leyes será "hasta que se agote el debate" y no se permitirá que la violencia imponga la agenda, "será tan solo una espera, demostraremos y desmontaremos todas sus mentiras".

En la mañana, el Primer Mandatario se dirigió a los ciudadanos desde el balcón del Palacio de Carondelet. En su discurso rechazó los actos violentos de la oposición y retó a sus detractores a reunir firmas para ir a una consulta popular de revocatoria de su mandato. Militantes de Alianza PAIS y ciudadanos que respaldan al Jefe de Estado se congregaron en la Plaza Grande.