Los dirigentes que convocaron a la movilización, que inició ayer en el cantón El Pangui (Zamora Chinchipe), hablaban de un levantamiento indígena nacional.

La convocatoria la hizo el presidente de la Conaie, Jorge Herrera, el 18 de julio. Oficialmente la marcha arrancó con una purificación a orillas del río Quimi, en la población de Tundayme.

Carlos Pérez Guartambel, presidente de la Ecuarunari, Kléber Jiménez (exasambleísta de Pachakutik); el asambleísta por Morona, Pepe Acacho; el prefecto de Zamora, Salvador Quishpe; Mónica Chuji  (exasambleísta constituyente y exsecretaria de la Comunicación en el actual Gobierno) y pobladores que llegaron de Azuay asistieron antes de partir a una ceremonia que duró más de hora. En el acto hubo la purificación a cargo de un chamán.

“Vamos a caminar y llegar a Quito con el apoyo de la Pachamama”, dijo Pérez, mientras sus compañeros descalzos acompañaban el acto.

Tundayme está situado cerca a la Cordillera del Cóndor y en el lugar se levanta el proyecto minero de cobre del mismo nombre, cuyos trabajadores ayer no laboraron. Los directivos chinos les dieron permiso para que vayan a sus hogares: “Nos dijeron que no hay trabajo y que el lunes a primera hora nos reintegremos”, indicó un trabajador de la empresa minera que desconocía de la marcha. Cerca del mediodía los manifestantes regresaron a Tundayme. En este sitio y con una vaca hecha de cartón, llamada por ellos de la dignidad, empezaron el recorrido.

Un altavoz detrás de la figura de cartón pedía que colaboren con dinero para solventar los gastos que deberán realizar hasta Quito. “Invitamos a la ciudadanía a contribuir para esta marcha sea histórica… Agradecemos la colaboración y espíritu de lucha”, se escuchaba.

Tundayme es una población de 800 habitantes aproximadamente, muchos de los consultados no conocían de esta movilización, otros, en cambio, dijeron que lo más importante es trabajar.

Igual situación se registró a lo largo de la vía desde Tundayme a El Pangui (23 kilómetros en auto), sus habitantes desconocían de la marcha o sus razones. “Para mí, lo más importante es trabajar, seguramente ellos no tienen nada que hacer”, dijo Rafael, un habitante. En varias partes de la manifestación, el recorrido no siempre se realiza a pie.

Los marchista salen caminado de las poblaciones consideradas las más grandes, y luego avanzan en caravana en sus respectivos autos donde son esperados por pobladores o simpatizantes. Tras la salida de Tundayme fueron hasta El Pangui, y tenían previsto llegar a la capital de Zamora Chichipe en horas de la tarde, un trayecto de 82,6 kilómetros (km).

Hoy lunes seguirán el camino hasta Loja, que comprende unos 57 km en carro.

En el comunicado entregado por la Conaie, se especificó que los marchantes llegarían a Cuenca el 5 de agosto.

El recorrido continúa a Riobamba entre el 7 y 8 de agosto y el 10 se prevé que lleguen a Latacunga. El 13 de agosto sería el día final cuando arriben a Quito y esa fecha el FUT se uniría a la convocatoria. “No levantaremos nuestra medida de hecho hasta obtener resultados y nos mantendremos en las calles el tiempo que sea necesario”, afirmó Herrera.

La Conaie denunció que la Policía en el puente del río Chuchumbletza habría impedido el paso de 5 vehículos, por falta de permisos. Los indígenas bloquearon la vía, pero luego de 2 horas se reabrió y los manifestantes siguieron su camino. (I)