Mediadores de ONU e Iglesia elaboran agenda de trabajo
La mediación para resolver el conflicto entre el Gobierno y los indígenas tuvo resultados que deben analizarse. Esta es una herramienta que se usa a nivel internacional cuando hay dos partes que no llegan a entenderse ni a acuerdos de ningún tipo.
Para dos analistas consultados por este Diario fue más política que técnica. ¿Por qué? No se tomó en cuenta el problema principal: cómo resolver el déficit fiscal por la aplicación de los subsidios, que suman $ 1.500 millones anuales.
El abogado en Derecho Transnacional y Mediación David Reinoso explicó que para mediar o negociar se requiere establecer datos y criterios objetivos para resolver el conflicto.
La mediación se utilizó para detener las manifestaciones de los indígenas en contra del Gobierno.
Los pueblos y nacionalidades salieron a las calles para pedir que se dejara sin efecto el Decreto 883 que eliminó los subsidios a los combustibles. Las protestas se extendieron por 11 días hasta que el Ejecutivo propuso la mediación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE).
El presidente Lenín Moreno también planteó un diálogo directo con los indígenas. Esa mediación y el diálogo pusieron fin a las protestas una vez que se anunció la sustitución del decreto.
Según Reinoso, hay cuatro aspectos que se toman en cuenta en este tipo de conflictos. Se debe separar a las personas del problema, luego enfocarse en los intereses comunes, generar opciones que consoliden esos intereses de todos y buscar los resultados en criterios consensuados.
Para el jurista Esteban Ron la mediación evitó que siguieran las manifestaciones “que se tornaron violentas por la intromisión de grupos políticos interesados en desnaturalizar y caotizar la protesta”, dijo.
El presidente de la CEE, monseñor Luis Cabrera, dijo que trabajan en una hoja de ruta para convocar a todos los sectores sociales a la mesa del diálogo con los indígenas.
Entre tanto, el presidente Lenín Moreno se reunió este miércoles 16 de octubre de 2019 con los representantes de los trabajadores públicos y privados y con la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) para escuchar sus propuestas. Los dirigentes sindicales destacaron la apertura al diálogo del Gobierno. (I)