Mesa sobre gobiernos golpistas
Manuel Zelaya comparte su experiencia
‘Neogolpismo, nueva derecha y otras estrategias de la restauración conservadora’ fue la última mesa del Encuentro Latinoamericano Progresista (ELAP), concluido ayer. Una mirada por el pasado golpista en América Latina, las conclusiones que dejaron estos acontecimientos fueron la tónica de este encuentro de izquierda que recordó el 30-S. En ese sentido se analizó el papel decisivo de los medios de comunicación privados para ocultar información y sostener procesos desestabilizadores. En la sala Benjamín Carrión se esperó la exposición del expresidente de Honduras, Manuel Zelaya, quien relató su experiencia en el golpe de Estado en 2009, cuando fue sacado del poder. Dijo que los militares irrumpieron en su domicilio con la consigna de acabar con su vida, pero el hecho no se concretó debido a que el mando militar decidió enviarlo a Costa Rica. Recordó su trayectoria política en la derecha, y relató que cuando asumió la Presidencia de Honduras se reunió con el presidente de EE.UU., George Bush, quien enfatizó la necesidad de que el país centroamericano fuera un puntal del imperialismo en contra de Venezuela.