El presidente Rafael Correa pidió ayer a los militares estar unidos y no dejarse sorprender por rumores falsos que buscarían crear malestar, como ocurrió previo a la revuelta policial del 30-S.

El pedido lo formuló ayer durante la ceremonia por los 20 años de la guerra contra Perú y el triunfo de las Fuerzas Armadas ecuatorianas en el Alto Cenepa. Allí rindió tributo a los 33 soldados muertos, así como a quienes resultaron heridos y mutilados; y a los comandantes y oficiales que dirigieron la guerra.

El Mandatario, que lució la banda presidencial, reconoció el valor político de las autoridades de ese entonces para firmar la paz, lo que ha traído desarrollo fronterizo, la demarcación definitiva de las fronteras terrestres y marítimas y el fin de conflictos bélicos en la región. Por segunda vez en menos de una semana Correa se dirigió directamente a los soldados.

Denunció una campaña de desinformación para otra vez generar malestar entre los militares. Ahora el rumor sería que las enmiendas constitucionales, propuestas por el oficialismo, buscarían desaparecer el Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa).

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“Lo diré por última vez: el Issfa no desaparecerá. Ustedes sabrán a quién creer, a los falsos de siempre o a su Comandante en Jefe”, aseguró ante una nutrida asistencia de militares de las 3 ramas (terrestre, aérea y naval), que se dieron cita en el estadio de la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro, en el norte de Quito.

Correa reiteró la necesidad de continuar las investigaciones al 30S para conocer quién lideró la campaña de desinformación al interior de las FF.AA.  

Recordó que desde 2007 el Gobierno es el que más ha atendido a las FF.AA., lo que se refleja en la inversión de $ 1.700 millones.  

Esa suma -explicó- ha servido para equipar con nuevas naves supersónicas y multisónicas a la FAE; repotenciar barcos de guerra, y comprar lanchas para la Armada, armamento y tecnología al Ejército.

Anunció la pronta llegada de 700 nuevos vehículos militares y radares. Además destacó que se ha tomado en cuenta el plano humano de los militares, que ahora tienen los sueldos más altos entre sus similares de Latinoamérica.  

El lema de la ceremonia fue ‘Victoria de la paz’ y se preparó una coreografía donde se exaltó el valor de los soldados, matizada con presentaciones musicales. Del evento participaron el Escuadrón de Guías de Canes; cuerpos de élite con ejercicios de destreza y habilidad; paracaidistas del Grupo de Fuerza Especiales No. 9 Patria; miembros de la Fuerza Naval; del Ejército y de los “Diablos de la Selva” o Iwias.