La Universidad de santiago otorga un doctorado honoris causa a correa
La experiencia ecuatoriana en educación atrae a Chile
El 11 de marzo pasado, cuando Michelle Bachelet asumió su segundo período en la Presidencia de Chile, sostuvo un breve diálogo con su homólogo ecuatoriano Rafael Correa. En esa conversación ambos prometieron profundizar en el futuro la relación bilateral.
Aquella promesa se concretó ayer, en Santiago, cuando la mandataria chilena recibió a Correa en La Moneda. Para Bachelet será una semana “internacional”, ya que el lunes viajó a Buenos Aires, donde sostuvo un encuentro con Cristina Fernández para profundizar la relación bilateral con Argentina.
Pero Bachelet no solo mira a Argentina como un socio clave, sino también al resto de los países de América Latina, donde Ecuador ocupa un lugar cada vez más importante para Chile.
De hecho, el ‘establishment’ (sistema) chileno está interesado en conocer en profundidad y de primera mano la reforma educativa que lleva adelante Correa. No por nada, la visita de Correa a Santiago ha sido destacada por los principales medios chilenos y estuvo antecedida por la del ministro coordinador de Talento Humano, Guillaume Long.
La visita del Jefe de Estado ecuatoriano será la primera de carácter oficial de un presidente extranjero a Chile en este segundo mandato de Bachelet. El encuentro se efectuó en el Salón Azul del palacio de gobierno. Luego, ambos encabezaron una reunión de ministros de Estado, en la Sala del Consejo de Gabinete para evaluar diversos temas bilaterales.
Tras esa reunión, Correa encabezó un coctel en el Salón Rojo y luego la presidenta chilena ofreció una cena en su honor en el Patio de las Camelias, a las 20:00.
Para hoy miércoles, está previsto que, en horas de la mañana, Correa diserte ante la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), conferencia auspiciada por la Fundación Salvador Allende.
También en la Universidad de Santiago (Usach), una de las más prestigiosas del país, será nombrado doctor honoris causa.
La semana pasada, el director de protocolo de esa institución, Marco Barraza, explicó que el Presidente ecuatoriano será distinguido por la “profunda reforma educacional que se ha llevado a cabo y promovido en su país”.
En Chile, el debate sobre los cambios que se necesitan en este sector está en el tope de la agenda, al igual que la reforma tributaria.
Durante el cambio de mando en marzo, el propio Rafael Correa se tomó un tiempo en Valparaíso, a la salida de la ceremonia, para dialogar con Camila Vallejo, la famosa exdirigenta universitaria que ese día asumió como diputada y llevó a su hijo recién nacido a la cita en el Legislativo.
En aquella ocasión, la ceremonia de investidura estuvo marcada por la crisis en Venezuela. Si bien Correa se refirió a la situación en aquel país, también pidió apoyo para Bachelet porque “su elección es una alegría para toda América Latina, no solo para Chile”.
En su visita, Guillaume Long también se reunió con Vallejo y otros diputados.
Hizo lo propio con las autoridades de educación de Chile a quienes explicó la experiencia ecuatoriana en las universidades.
Como parte de ese proceso, Ecuador remarca la evaluación de las universidades, el cierre de 14 centros por no haber logrado el puntaje mínimo y la creación de otras 4:Yachay, Ikiam, Uniartes y Unae.
Integración con Argentina
Las presidentas de Chile, Michelle Bachelet, y de Argentina, Cristina Kirchner, dieron nuevo impulso, en Buenos Aires, a un ambicioso plan de obras de caminería y ferroviarias en la fronteriza cordillera de Los Andes, que fomentará el comercio bilateral y los vínculos entre Sudamérica y Asia.
Bachelet y Kirchner firmaron sonrientes, en el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada, una batería de convenios, entre ellos uno que reactiva el Tratado de Maipú, suscrito por ambas en 2009 para mejorar la unión física argentino-chilena.
“Queremos duplicar la conectividad con la Argentina y con los países fronterizos”, dijo la presidenta chilena en su primera visita al exterior desde que asumió en marzo pasado la primera magistratura. Ella sucedió en el cargo al derechista Sebastián Piñera.