Criterios divididos se produjeron entre delegados de los gobiernos autónomos descentralizados (GAD) durante el análisis del informe del Comité de Límites Internos (Conali), respecto del proyecto de Fijación de Límites Territoriales Internos del Ecuador, que conoció la Comisión de Gobiernos Autónomos de la Asamblea.

Los criterios se enfocaron en los límites Guayas-Bolívar, Guayas-Azuay, Pichincha-Esmeraldas y entre los cantones Pucará-Camilo Ponce Enríquez (Azuay).

El delegado de la Prefectura del Guayas, Xavier Sandoval, indicó que si bien no están conformes con lo resuelto por el Ejecutivo mediante un proceso administrativo, aceptan la decisión, pero autoridades de Bolívar pidieron el archivo del proyecto porque consideraron que perjudica a su provincia.

Guayas y Bolívar tienen disputas por el sector del recinto Santa Rosa de Agua Clara, entre los cantones Chillanes (Bolívar) y General Antonio Elizalde (Guayas).

Los delegados de esta circunscripción respaldaron su postura con pronunciamientos constitucionales y certificados de asambleas ciudadanas. Exigieron que se respeten los límites fijados en la creación de Bucay, en 1907. Todos consideraron que el problema lo generó el Comité de Límites Internos (Conali).

Lo mismo ocurrió con los delegados de los cantones Pucará y Camilo Ponce Enríquez (Azuay). Señalaron que nunca hubo problemas de límites, pero el  Conali, sin haber socializado ni realizado visitas de campo, les notificó la existencia de inconvenientes.

Sobre Guayas y Azuay delegados de la parroquia Molleturo (cantón Cuenca) declararon que con el proyecto perderían 23 comunidades.

Raúl Muñoz, secretario técnico del Conali, explicó los procedimientos para solucionar la falta de delimitación territorial, para lo cual se acudió a mecanismos institucionales, porque los amistosos se agotaron.

La Ley de Fijación de Límites estableció los procedimientos amistosos e institucionales para decidir sobre estos problemas. (I)