Virgilio Hernández, exconsejero de Gobierno y militante de Revolución Alfarista (aún sin personería jurídica), cuestionó el inicio de la investigación de la Fiscalía en contra del exmandatario. A su criterio, se trata de un instrumento de persecución.

¿Qué lectura efectúa de la instrucción fiscal iniciada, por supuesto delito de peculado, en contra del expresidente Rafael Correa?
Si es que se actúa de acuerdo a derecho y en justicia, este proceso de investigación previa dirá que el expresidente no tiene ninguna responsabilidad, ni civil, ni penal ni administrativa. El peculado es un delito de resultados, donde tendrían que demostrar que en esas actuaciones se cometió dolo, que se actuó con mala fe y que tuvieron como beneficiario al expresidente Correa o a un tercero.  

¿Considera que no hay pruebas?
Todas las pruebas indican que se actuó de manera absolutamente consecuente con el país, y lo que se hizo fue en cumplimiento de sus obligaciones: emitir un decreto que básicamente lo que hacía es establecer los mismos condicionamientos que el Fondo Monetario Internacional (FMI) sugiere para todos los países.

Desde su punto de vista, ¿este tema tiene algún objetivo?
Lo que hacen la asambleísta (Cristina) Reyes, la Contraloría, algunos medios de comunicación y el Gobierno, es generar unas condiciones en la opinión pública que tergiversen la realidad y establecer una sanción, para que los escándalos mediáticos generen presión sobre la Fiscalía... ¡Esa es la jugada!, que la Fiscalía actúe por fuera de derecho.

¿Tomarán alguna medida como Revolución Alfarista?
El expresidente tiene su defensa jurídica y la seguirá, pero nosotros también, obviamente, vamos a denunciar en Ecuador y en el mundo cómo se quiere utilizar un informe para tratar de encausar al expresidente Correa y parar esta persecución política.

¿El expresidente volvería a Ecuador aun cuando exista la posibilidad de una medida de prisión preventiva?
Es un ecuatoriano que puede volver las veces que sean necesarias y quiera; nosotros estamos muy conscientes de que el objetivo es perseguirlo judicialmente y sacarlo del mapa político. Esa es una consigna, y vamos también a responder. (I)