Hacía 8 años que el presidente de la República, Rafael Correa, y el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, no se saludaban. Ayer coincidieron en la inauguración del edificio de la Contraloría General del Estado, al norte de la urbe porteña.  

Ambas autoridades recorrieron las modernas instalaciones y participaron de la bendición de la infraestructura, cuya construcción estuvo a cargo del Cuerpo de Ingenieros del Ejército.

La obra inició en 2012 y tuvo un costo de alrededor de $ 10 millones. Será un edificio al servicio de la ciudadanía  porque esas oficinas registran  400 atenciones diarias.   

El Presidente y el Alcalde se saludaron y fueron corteses. Se cedían el paso, mientras saludaban a los empleados de la Contraloría. Luego se sentaron en la mesa principal,  separados por el contralor Carlos Pólit, quien cursó las invitaciones a ambos para la inauguración, en plenas fiestas de Independencia del puerto principal.   

Nebot es uno de los principales opositores al Gobierno. El 25 de junio organizó una multitudinaria marcha en contra de la administración de Correa.  

La cordialidad entre los políticos nunca se perdió. Durante el discurso de Correa, el burgomaestre lo escuchó atentamente y hasta rió con los chistes que hizo el Mandatario.      

El cierre del evento ocasionó una lluvia de flashes de los fotógrafos apostados en el recinto. Tras la intervención, Nebot y Correa intercambiaron palabras, hubo sonrisas, apretones de mano y palmadas en la espalda.

Nebot lidera el grupo denominado ‘La Unidad’, que integran también Mauricio Rodas y Paúl Carrasco, alcalde de Quito y prefecto de Azuay, respectivamente. Y ellos se han presentado como una alternativa de cambio para 2017.  

El Mandatario, en cambio, durante sus enlaces ciudadanos, suele criticar al Alcalde. Correa en su discurso resaltó que seguirá trabajando por el desarrollo del país y una muestra de ello es el cambio de época “porque ya no existe la visión de que lo público es lo peor”.  

Una muestra de este trabajo es que Ecuador antes de este Gobierno tenía el segundo peor servicio público de la región y ahora, con datos hasta 2013, está entre los 6 mejores de Latinoamérica. “Estoy seguro de que con los datos actuales  nos encontramos aún en mejores puestos”, indicó.   

Pero reconoció que aún falta mucho por hacer. Entre esos pendientes están correcciones para agilizar procesos, por eso destacó la enmienda constitucional sobre las competencias de la Contraloría.   

“La Contraloría debe velar porque  hasta el último centavo de los fondos públicos sea utilizado con honestidad y transparencia”, comentó. Sin embargo, criticó ciertos informes emitidos por esta entidad: “La Constitución le otorgó en 2008 la capacidad de realizar auditorías de gestión”, lo que en muchas ocasiones complica a las autoridades, aseguró el Jefe de Estado, quien leyó un informe que la entidad realizó al Ministerio de Salud por la compra de un medicamento.

“Estoy seguro de que la Contraloría tiene extraordinarios auditores, pero no tiene por qué tener  centros químicos farmacéuticos”, detalló.

Por eso la enmienda elimina esta prerrogativa del organismo de control.  

Correa ratificó el apoyo a la entidad para el control a la corrupción, al peculado, pero insistió en que la calidad de gestión no debe ser evaluada por ellos, sino por las autoridades electas. Para evitar que se den estos problemas, explicó, es que se proponen las enmiendas constitucionales.

Criticó también que una autodenominada comisión de la sociedad civil  pretenda poner en duda el trabajo de la Contraloría, en referencia a un grupo conformado por la oposición.

Tanto Pólit como Correa detallaron que el objetivo de la entidad es mejorar los servicios para descentralizar la gestión y evitar que la ciudadanía tenga que viajar solo para obtener un sello.

Guayaquil más verde

Como un homenaje a la ciudad, por cumplir 195 años de independencia, el Primer Mandatario inauguró la Zona de Reserva Forestal Senderos del Parque Samanes.    

El Mandatario llegó cerca del mediodía a las instalaciones, se cambió de ropa y se equipó para recorrer los 7 kilómetros de sendero destinados a la ciclovía y observar las 2 torres para canopy, el rocódromo, las 2 torres de observación, además de 1.2 kilómetros de sendero adoquinados para los peatones.                

En el periplo, que le tomó alrededor de una hora, el Jefe de Estado estuvo acompañado de la Organización de Ciclistas de Guayaquil, cuyo representante, Esteven García, le entregó  posteriormente una indumentaria del grupo como agradecimiento.

La ministra coordinadora de Desarrollo Social, Cecilia Vaca, recalcó que este tipo de obras permiten que Guayaquil incremente la cantidad de metros cuadrados verdes por habitantes, pues el puerto principal es una de las urbes con menos cantidad de parques.

Samanes se ha convertido en un espacio de recreación familiar. Ahora todos pueden compartir en este sitio el desarrollo de actividades favorables para la salud, enfatizó Julio César Quiñónez, gobernador de Guayas.

Vaca recordó que este tipo de espacios son parte de la propuesta de la política social que se aplica en el país. Mientras que Correa recalcó que no solo ayuda a tener un mejor ecosistema sino que favorece las costumbres saludables en la población y elimina el sedentarismo, que produce enfermedades. Esta obra está enmarcada en la decisión de realizar un trabajo preventivo en la población.      

La Ministra detalló que aunque el parque no está terminado ya recibe 2 mil visitas al mes de ecuatorianos y extranjeros.  

Con la inauguración de los senderos no concluye el parque, pues tiene una extensión de 851 hectáreas. Hasta ahora ha significado una inversión de $ 334 millones. Allí funciona el estadio de fútbol Chucho Benítez. (I)