Tener un solo régimen de aportaciones y prestaciones en el Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa) es una de las principales reformas a la Ley de Fortalecimiento a la Seguridad Social que propone la institución militar.

En la actualidad, el proyecto se encuentra en la Presidencia de la República, por lo que se espera que pronto sea enviado a la Asamblea Nacional para su respectivo análisis y tratamiento.

Datos del Issfa indican que, a octubre de este año, de los 41.224 militares en servicio activo, 10.810 están en el nuevo sistema de aportaciones voluntario del 20,60% de su salario (11,45% individual y 9,15% patronal-Ministerio de Defensa).

El director general del Issfa, Alejandro Vela, capitán de Navío de Estado Mayor Conjunto en servicio pasivo, manifestó que en ese grupo se encuentran jóvenes graduados después del 1 de enero de 2017 y grados inferiores de oficiales de tropa. Mientras que otro grupo de 31.414 militares aportan con el 49% (23% individual y 26% patronal).

Para darle mayor peso a la propuesta de reforma, el Issfa realizó un estudio actuarial que, entre otras cosas, hace un análisis de la situación financiera de la entidad y su proyección a futuro para cumplir obligaciones.

Vela indicó que con las reformas que se hicieron al Issfa en octubre de 2016, el Estado deberá cancelar más de $ 18.000 millones en 50 años. “Esto significa que el efecto de la ley le generó una mayor responsabilidad al Estado en el aspecto económico”, señaló el director de la entidad.

El tema originó la creación de un proyecto de reformas, que consta de 23 artículos y 5 disposiciones transitorias. El principal objetivo es que todo el personal militar se acoja al anterior sistema y que así el Estado no entregue al Issfa esos $18.000 millones, sino $ 9.000 millones.

Vela dijo que la ley actual establece que el Estado contribuye con el 60% para el pago de pensiones en el caso de las FF.AA. y Policía Nacional, pero ese porcentaje subirá cada año, ya que el Issfa recibe menos recursos por aportes de sus miembros.

“Entonces, la entidad ya no puede pagar ese 40%, hoy solo alcanzamos el 30% de las pensiones. Como no tenemos más dinero, el Estado pone la diferencia, que es el 70%”.

Sostuvo que hay militares que desean volver al sistema anterior de aportaciones en la entidad, es decir, el del 49%, y que si se aprueban las reformas a la ley, el pedido sería progresivo hasta igualarse con el resto.

Puso el ejemplo de un sargento que se retira con 20 años de servicio, que con el anterior sistema recibiría alrededor de $ 49.000 de cesantía, pero con el actual tiene $ 20.000, porque solo le devuelven sus ahorros”.  

Datos del Issfa indican que la población protegida por el régimen especial de seguridad social de las FF.AA., a octubre de 2019, es de 230.229. Allí se encuentran los militares activos, dependientes de afiliados, pensionistas de retiro, invalidez e incapacidad, pensionistas de montepío del Issfa, entre otros.

Wagner Bravo, exjefe de Estado Mayor del Ejército, indicó que el Issfa, al momento, perdió cerca de $ 240 millones tras reformarse la Ley de Fortalecimiento a la Seguridad Social.

“Con esto destruimos al sistema, tomando en cuenta que en 15 años la nueva generación reemplazará a la de transición y se acabará lo que consta en la Constitución, de que las Fuerzas Armadas y Policía Nacional son un régimen especial”.

Bravo dijo que desde diciembre de 2016 han presentado 220 demandas de inconstitucionalidad a esta ley, pero hasta el momento la Corte Constitucional no se ha pronunciado.

En julio pasado, la deuda de $ 480 millones que el Gobierno mantenía con el Issfa se redujo 40%, por lo que ahora se ubicó en alrededor de $ 291 millones. (I)