“Ecuador no negociará a cualquier costo”

El presidente Rafael Correa ratificó  ayer, en el marco del enlace ciudadano que se desarrolló en la parroquia Tumbaco (Quito), la voluntad del Estado de  firmar un  acuerdo con la Unión Europea (UE)  y que  “no se está negociando un Tratado de Libre Comercio (TLC)”.

Sin embargo, el Jefe de Estado  señaló que el país no está  dispuesto a firmar a cualquier costo, sino  “respetando algunas líneas rojas, nuestras posturas, lo que se puede ceder y lo que no se puede”, entre ellas acceso a mercado, defensa comercial, servicios, contratación pública y propiedad intelectual.

Francisco Rivadeneira, ministro de Comercio Exterior, manifestó   que la tercera ronda de negociaciones se realizará en mayo y que el Estado espera hasta junio y julio cerrar el acuerdo comercial, una vez que el 31 de diciembre de este año  concluyen las ventajas unilaterales  del Sistema General de Preferencias  (SGP Plus) que otorga la Unión Europea .

“Vamos a negociar fuertemente defendiendo los intereses del país; hasta que no esté todo aprobado no hay nada aprobado”, dijo el Mandatario, a la vez que sostuvo que de llegarse a concretar un acuerdo el Estado puede denunciarlo inmediatamente   si se evidencia que  no funcionó,  “sin que continúen  de largo aliento los compromisos adquiridos”, complementó Rivadeneira.

El Mandatario ratificó que no se está “negociando un TLC, estamos preservando importantes instrumentos para proteger y promover  la producción y el empleo”.

Correa señaló que la posición  negociadora que Ecuador mantiene, en  cuanto a acceso, es seguir y profundizar el acceso a un solo territorio aduanero de los 28 estados; es decir la liberación de aranceles y restricciones de la oferta exportable de Ecuador. “Aquí la única excepción sería el  banano”, explicó, sin embargo, detalló que el  producto entraría con los mismos aranceles que los competidores regionales de Colombia, Costa Rica, entre otros.

Ecuador solicita a la  UE que el  banano ingrese con un contingente mucho mayor para   crecer con las mismas preferencias en el mercado.

Correa enfatizó que se busca el acceso inmediato a las materias primas, insumos y bienes de capital, que no se producen o se producirán en el futuro en el país.

El Mandatario afirmó que se buscará desgravar  en periodos largos productos que pueden afectar al aparato productivo nacional. Explicó que se pretende, por ejemplo, 10 años para los productos industriales y 15 para los agrícolas. 

El Jefe de Estado recordó que Colombia y Perú ya firmaron un TLC con la UE y que el primer país mencionado también produce banano y que esa fruta entraría con menor arancel al ecuatoriano: “todas esas cosas hay que tomar en cuenta, en la política no solo depende de lo que uno haga, sino de lo que haga el resto”.

Enfatizó  que Ecuador “no tiene moneda nacional, política monetaria; no tenemos tipo de cambio como instrumento para equilibrar problemas externos, solo tenemos la política comercial y eso se condiciona y se restringe con estos acuerdos”.

En cuanto a contratación pública, Correa explicó que se buscará preservar las compras públicas como instrumento de desarrollo. En este caso se habla de las excepciones al trato nacional para las pequeñas y medianas industrias, umbrales mínimos de acceso, listas específicas de bienes y servicios abiertos a compras públicas. Así como preservar la capacidad regulatoria del Estado  en sectores estratégicos.

En cuanto a propiedad intelectual, Correa enfatizó que se fomentará la generación de conocimiento aplicado en el país con cooperación y se preservará  la posibilidad de que el Estado ecuatoriano produzca medicinas y que la salud prime sobre la propiedad intelectual.

Finalmente, en defensa comercial, el presidente dijo que  se asegurarán y preservarán instrumentos que garanticen el equilibrio macroeconómico   y la dolarización. Además se  establecerán mecanismos para contrarrestar efectos derivados de los subsidios agrícolas europeos.