Ecuador planteó aunar esfuerzos para disminuir los índices de pobreza extrema como uno de los desafíos durante la presidencia pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que asumió ayer en San José, de Costa Rica.  

Pero esa no es la única propuesta que planteó el presidente Rafael Correa, en la III Cumbre de Jefes de Estado, que se realiza hasta hoy en la provincia costarricense de Heredia, pues durante la gestión buscará la promoción de la nueva arquitectura financiera, y el desarrollo de la ciencia y tecnología y de la infraestructura vial, productiva y energética.

Para ello el Jefe de Estado plantea cumplir metas medibles en los próximos 5 años, una de ellas sería justamente eliminar la pobreza extrema. Destacó la necesidad de acortar la brecha de conocimiento con apoyo de socios extrarregionales. Afirmó que ahora la región invierte 0,8% del PIB en investigación y desarrollo, pero que se debe duplicar  a un 1,5% hasta 2020.

En este punto la meta sería colocar a 12 universidades de América Latina y el Caribe entre las 200 mejores del mundo. Pero aquello solo se consolidará aportando el 1,7% del PIB en educación superior.

Para cumplir estos planteamientos, Correa considera que hace falta “decisión política”, pues señaló que declarar a la región libre de extrema pobreza “son cosas que se pueden hacer”. Recordó que según la Cepal hay 68 millones de latinoamericanos en extrema pobreza. “Con la mejora en la distribución -con los  actuales recursos- se podría eliminar toda forma de pobreza”, recalcó ante sus colegas de toda la región.

Recordó que la pobreza es fruto de inequidad, no de falta de recursos y “esto fruto de las relaciones de poder en donde pocos dominan todo”.  

En la cita participaron 28 de los 33 mandatarios miembros de Celac, a excepción de los  presidentes de Argentina, México, Paraguay, Perú y Honduras.

La Cumbre se realizó en la localidad de Pedregal, en donde se adecuó un centro de convenciones para recibir a las delegaciones de los 33 países miembros. El lugar se adornó con más de un millón de orquídeas y gringes, flores tradicionales del país centroamericano.

Correa llegó en la mañana al aeropuerto Santa María. Allí fue recibido por una corte de honor, integrada por más de 20 niños de las 4 escuelas públicas de San José de Costa Rica.

Uno de esos pequeños era Gabriel Matamoros, de 12 años, quien hizo todo lo posible para saludar al presidente ecuatoriano.

El estudiante es costarricense, pero su padre, quien falleció hace un año, era ecuatoriano. “Mis abuelitos me dicen que es un gran presidente y por eso quiero conocerlo”, expresó el infante, mientras flameaba una bandera de su país de nacimiento.

Al contrario de otros países, Costa Rica no tiene fuerzas militares desde 1948, por ello para los recibimientos de los jefes de Estado  se iban a realizar honores policiales, pero se dio paso a los niños, quienes rodearon al Jefe de Estado y le solicitaron tomarse una foto con él. En ese grupo estuvo Gabriel, quien al abrazar al Mandatario recordó a su papá, según declaró después.

Durante su intervención, Correa dijo que los mandatarios están allí para construir el sueño de los libertadores: la Patria Grande. Esa visión se está cumpliendo, “pero queremos ir más rápido con objetivos concretos, con metas cuantificables, siendo eficientes, siendo eficaces”.

Señaló que uno de los imperativos morales es declarar a la región libre de pobreza extrema. “Son cosas que se pueden hacer, es decisión política”, insistió. Por ello, reiteró que los gobiernos necesitan resultados y por ello es deber “dar resultados” a sus pueblos.

El canciller Ricardo Patiño contó que Ecuador planteará “metas concretas y medibles” para la organización a 5 años plazo, “que serán la guía del trabajo de quienes asuman la presidencia”.

Otra prioridad es la innovación y el conocimiento, consideradas piezas clave para el desarrollo. “El conocimiento como bien público y la inversión en talento humano no solo nos hará prósperos, sino más justos, nos libera del neocolonialismo”, aseveró Correa.  

Luis Guillermo Solís, presidente de Costa Rica, quien entrega la presidencia pro témpore a Ecuador, abrió la conferencia. En su discurso hizo un balance de su gestión. Para él se logró una consolidación orgánica multilateral con instituciones regionales y subregionales y extraregionales. “Hemos fortalecido también la dimensión multilateral de la Celac”, dijo, y citó entre los logros del foro la organización del encuentro con China.

En los próximos días se concretarían acuerdos con la Unión Europea (UE), que en junio mantendría una reunión con la Celac.

Justamente el diálogo entre bloques es lo que se busca promover en la presidencia ecuatoriana. Además de con China y la UE, habría opciones para cumbres con Rusia, el sudeste asiático, entre otros.

Solís enfatizó que resulta necesario que la región promueva una agenda que reconozca las necesidades específicas de desarrollo de los llamados países de “renta media”. “Nuestros esfuerzos no serán exitosos si la comunidad internacional no comprende y no se solidariza con el mayor grupo de países en vías de desarrollo, cuyas realidades de asimetría, pobreza, exclusión y débil o insuficiente desarrollo científico y tecnológico resultan frecuentemente disimuladas por esa denominación tan ambigua y que solo atiende a los aspectos macroeconómicos”.

El Mandatario costarricense también aludió a expresiones del excanciller ecuatoriano Fander Falconí. “Actuar con esa lucidez, fuerza y determinación constituye la irrupción del Sur”, dijo al recordar que  Falconí convoca a una hora nueva en América Latina, “una hora nueva signada por una incursión global asertiva e inteligente que genere propuestas propias y estratégicas en el plano internacional”.  

Organismos internacionales exigen realizar acciones para erradicar pobreza

Alicia Bárcena, titular de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), pidió a los jefes de Estado de Celac realizar esfuerzos para reducir la extrema pobreza en  la región.

Dijo que desde 2012, la pobreza se estanca en 28% y pobreza extrema en 12%. Pidió a los mandatarios realizar una agenda para cerrar brechas en los próximos 10 años.

Ese criterio compartió José Miguel Insulza, secretario de la OEA, quien llamó a mantener o recuperar los ritmos de crecimiento que caracterizaron a la región.  

En cambio José Graziano, director general de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), señaló que el plan de trabajo de Celac será un instrumento para lograr un futuro sin hambre y pobreza extrema. “Es necesario reducir a la mitad la extrema pobreza”, insistió.

Presidentes piden unidad en la Cumbre de Celac     

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, recordó que América Latina vive un nuevo ciclo tras 200 años de buscar un camino propio, al arribar  a la sede de la III Cumbre de la Celac. “Estamos viviendo un nuevo ciclo geopolítico regional, estamos en el tiempo de nuestra América Latina y Caribeña, luego de 200 años buscando nuestro camino”, expresó Maduro antes de ingresar al recinto en la localidad de Belén, 15 kilómetros al norte de San José, donde se reúnen los gobernantes de los 33 países que integran el foro.

Algo parecido pidió Solís. Él llamó a la Celac a consolidar sus alianzas internacionales para que América Latina y el Caribe puedan hablar al mundo con una sola voz, por ejemplo en el Consejo de Seguridad de la ONU. Correa en ese sentido quiere lograr un consenso para actuar coordinadamente en la OEA o en torno al debate sobre los derechos humanos.

“Debemos concretar las agendas que como región queremos desarrollar con otros mecanismos de coordinación o bien países y regiones, como son la Unión Europea, el (Sudeste Asiático), China, Rusia, India o Sudáfrica”, declaró Solís.

El presidente de Cuba, Raúl Castro, condenó las sanciones impuestas por Estados Unidos a funcionarios de Venezuela, al tiempo que saludó los avances en el proceso de paz de Colombia. Mientras que el presidente Correa presentó su respaldo a Argentina y Venezuela, cuyos gobernantes enfrentan sendas crisis políticas.

DATOS

Estos son los datos e indicadores sobre la Celac, según cifras de 2013 y 2014 de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), el Banco Mundial y la Organización Internacional del Trabajo (OIT).   

En cuanto a pobreza, el promedio en la región cayó de 48% en 2002 a 28% en 2012, pero el proceso de reducción se detuvo y se mantuvo en 2014 en el mismo porcentaje, que representa a 167 millones de personas.

El desempleo urbano fue de 6,1% en 2014, levemente inferior al de 2013, que se ubicó en 6,2%.

América Latina y el Caribe constituyen la región con mayor producción y exportación de alimentos del mundo. El bloque representa casi 30% de la superficie forestal del mundo, además posee 33% de los recursos hídricos, es decir, la región con la disponibilidad de agua más alta del planeta.

En 2014 la región experimentó un crecimiento de 0,8% con respecto al año anterior, según el Banco Mundial, mientras que la CEPAL proyecta un 2,2% para 2015. El Producto Interno Bruto (PIB) de los 33 países se estima en unos $ 6 billones (millones de millones).  

En 2013, la inversión extranjera directa en el bloque fue de $ 188.101 millones, cifra que representa un aumento de 6% en comparación con el año anterior.

En 2013, las exportaciones de la región ascendieron a $ 1,09 billones, con un crecimiento de apenas 0,1% con respecto al año anterior.

El bloque se caracteriza por ser uno de los principales exportadores de materias primas. América Latina cuenta con las mayores reservas de petróleo del mundo y una de las más importantes de gas, sobre todo en Venezuela, Brasil y Bolivia.