Asamblea aprobó la Ley de Aguas (Documento)
El Pleno de la Asamblea Nacional aprobó hoy la Ley de Aguas. La normativa fue aprobada con 103 votos a favor, 21 en contra y 6 abstenciones.
La normativa se remitirá al Ejecutivo para que emita un veto parcial o total a la normativa.
Gabriela Rivadeneira, presidenta de la Asamblea, señaló que el Legislativo entrega al país una ley, basada en "el Socialismo del Buen Vivir y el Sumak Kawsay".
Rivadeneira señaló que la Asamblea tomó una “decisión de firmeza” con respeto y legitimidad. Señaló que respetan las movilizaciones por la Ley de Aguas, “pero agradecemos a las 7.000 personas que exigieron y apoyaron la aprobación de Ley de Recursos Hídricos”.
Manifestó que las mesas de diálogo fueron amplias.
Calificó como una “falsedad y demagogia” a los criterios de ciertos opositores, que señalan que se privatizará el líquido vital o que se aumentará el costo del gas.
Dijo que se “trabaja con soberanía con base a nuestros recursos estratégicos”.
A criterio de la presidenta de la Asamblea, el agua es un recurso patrimonial que “debe tener control evaluación y seguimiento”.
Rivadeneira señaló que el Consejo consultivo, que será parte de la autoridad única del agua, estará integrado por las organizaciones y dará acompañamiento y veeduría a quienes ejercen política pública, para garantizar acceso a la Ley y cumplimento de la Constitución.
La presidenta de la Asamblea dijo que a través de la consulta prelegislativa “el aporte de las organizaciones fue sustancial para la norma”.
Agradeció a las organizaciones que apoyaron la elaboración de la norma.
Miguel Carvajal, ponente de Comisión de Soberanía Alimentaria, también agradeció a los movimientos y organizaciones sociales por el apoyo en elaboración de la Ley de Aguas.
Afirmó que la norma estipula la conservación, protección y salvaguardia del recurso para una
distribución justa.
Destacó que las observaciones de la Ley de Aguas fueron realizadas por PAIS, aliados y oposición, “aunque votaron en contra”, dijo, a la vez que comentó que las observaciones permiten hablar del compromiso por tener una “ley democrática”.
Carvajal enfatizó que la Ley de Aguas es una deuda, que mantiene la Asamblea desde 2008, a pesar de que dijo que fue mucho antes de Montecristi, cuando los movimientos afro, montubios e indígenas solicitaron revisión de la normativa de 1972.
Dijo que la ley de 1972 permitió que el agua sea un patrimonio cultural, pero también logró resolver “una institucionalidad caótica por la que se dio abusos y acaparamientos de la norma”.
A su criterio, la norma garantiza “que el agua no puede ser privatizada”. Además dijo que el recurso natural “no puede ser afectado por cálculos políticos coyunturales como la marchas”.
Carvajal afirmó que es una ley que promueve los sistemas comunitarios de agua, ya sean de indígenas o mestizos.
Agregó que es una ley que fortalece los sistemas de gestión que tienen fuerza histórica.”Es mentira que es una ley que afecta a los sistemas comunitarios, sino que fortalece y obliga a los GAD a fortalecerlos”.
A criterio del ponente, la norma dispone medidas para que se destine los recursos a la conservación del agua, bosques, páramos y lagunas. Además establece que en todas las tarifas debe haber un componente para la preservación del sistema.
“Estado, consumidores, juntas de regentes debemos proteger donde exista y genere agua. ¿De qué nos servirá tubos y canales si no hay agua?”, dijo.
Acotó que el Consejo plurinacional , que será parte de la autoridad única del agua, tendrá participación en formulación de políticas y veedurías. “Es una ley que dispone medidas administrativas claras para corregir desigualdades de acaparamientos”, enfatizó.
Finalmente, el legislador concluyó que la Ley de Aguas es “democrática, participativa, responsable, ambientalista y protege derechos colectivos e individuales”.
El debate en el Legislativo
Con la presencia de 126 legisladores, en la Asamblea Nacional se reanudó esta mañana la sesión 40 para continuar con el segundo debate de la Ley de Recursos Hídricos. En los exteriores miembros de varias organizaciones sociales se han dado cita para seguir de cerca el debate.
Durante el debate, los legisladores presentaron sus puntos de vista. El primero en intervenir fue Miguel Carvajal (PAIS), presidente de Comisión de Soberanía Alimentaria, quien aseguró que la normativa estipula que está prohibida toda forma de privatización del líquido vital.
"El agua es parte de los recursos estratégicos", señaló Carvajal al recalcar que por tanto su rectoría le corresponde al Estado, pero con veeduría social.
Añadió que la Ley de Recursos Hídricos garantiza el derecho del ser humano al agua y promueve la participación de organizaciones de usuarios a escala nacional.
De su lado, el legislador por Guayas, Ángel Rivera (AP), dijo que esta ley es importante porque no existe una normativa que verdaderamente garantice los derechos de los agricultores y campesinos, pues deconcentra el acceso al recurso hídrico y permite evitar la privatización. También propuso hacer cambios en ciertos literales de artículos.
En tanto que María Alejandra Vicuña subrayó que esta ley es resultado de un trabajo "conjunto, participativo y plural".
Mientras que Raúl Auquilla, asambleísta por CREO, manifestó conformidad con el 95% del proyecto y entregó a la Secretaría de la Asamblea una moción para que la votación sea por artículos.
El Pleno fue convocado para las 09:30 para la votación de la normativa. El titular de la Comisión de Soberanía Alimentaria, Miguel Carvajal, aseguró que se cumplió con la revisión del texto y que se mejoró la redacción del documento final que será expuesto ante los asambleístas.
En el texto se incluye la no privatización del agua; el acceso al agua como un derecho humano y que el Estado fortalezca la gestión pública y comunitaria. Además se incorporaron aspectos sobre la conservación de fuentes hídricas, patrimonio y sanciones.
Franklin Columba, dirigente de la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin), apoyó ayer la aprobación porque se recogieron los puntos de consenso de la consulta prelegislativa. Por eso realizarán una marcha de respaldo.
Lourdes Tibán (PK) dijo que con la posible aprobación de la ley no cambia la agenda de la Conaie de avanzar en la movilización nacional desde el sur del país hacia Quito. La marcha, que salió el sábado de Zamora, llegó ayer a Loja.
Masivo apoyo a la Ley de Aguas
"El agua ya es de todos (...) tenemos Ley de Aguas", gritaron efusivos cientos de personas que se congregaron esta mañana en la Asamblea Nacional, luego de que conocieron que la norma se aprobó en el pleno del Legislativo.
La concentración a favor de la Ley de Aguas fue masiva. En la calle Piedrahita, a la altura de la calle Luis Saá, colocaron rótulos gigantes en donde manifestaron su apoyo a la norma.
Llegaron desde provincias como Loja, Sucumbíos, Santo Domingo de los Tsáchilas, Imbabura, Guayas, Esmeraldas, Orellana, entre otras.
Desde la tarima, la música del conjunto Proyección Altiplano, animó a los asistentes y acompañó a los festejos de diferentes colectivos que atendieron pacientemente el debate transmitido desde dos pantallas.
"Esta ley ayudará a que los menos favorecidos tengan agua, porque es un derecho para todos", opinó convencido Moisés Torres, habitante de la provincia del Napo, quien vino con su familia y con cientos de compañeros. Se movilizaron en 22 buses.
La presencia de los simpatizantes fue transmitida en canal abierto y una cámara rodante filmó a los asistentes. Moisés no perdió el tiempo en mostrar su rótulo: "Napo dice si a la Ley de Aguas", dijo.
Los mismos ánimos mostró Inés Róales, habitante de la parroquia de Malacatos, en la provincia de Loja. Ella llegó a la capital junto con otros 200 compañeros.
Cuando conoció que la norma fue aprobada, no ocultó su satisfacción. "En la tarde nos vamos pero me regreso a mi tierra muy contenta porque cumplimos con nuestro deber", comentó.
Su compañera, Betty Cuenca, agricultora y oriunda de la parroquia Yangana la respaldó. "La gente piensa que con esta ley es solo para que tengamos agua, pero es más importante porque garantiza que contemos con infraestructura para servirnos del líquido", explicó.
Durante el debate también se hicieron presentes organizaciones que manifestaron su rechazo a la norma. Por ello, un contingente de policías dividió la calle con cercos de metal. Los que estuvieron en contra se concentraron en la misma calle, a la altura de 12 de Octubre.
Las organizaciones vinieron desde Imbabura, Cotopaxi, Cañar, Azuay, en representación de la Confederación Kichwa del Ecuador (Ecuarunari), Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (Confenaie), entre otros organizaciones.
Desde tempranas horas de la mañana se aglutinaron en el Parque El Arbolito y llegaron hasta el Palacio Legislativo. "Esta manifestación no solo es del pueblo indígena, sino del pueblo nacional", señaló Marco Guatemal, presidente de la de la Federación de Indígenas y Campesinos de Imbabura (FICI).
Cuando el manifestante conoció de la aprobación de la norma opinó: "Es una ley que sigue garantizando la privatización del agua y quitando los sistemas de tomas de decisión de las juntas de regantes".
A los pocos minutos de que se anunció el nuevo cuerpo legal, los manifestantes se retiraron del lugar y regresaron hasta el Parque El Arbolito.