El próximo 5 de marzo se renovaría el liderazgo de la agrupación política
Las bases de la Conaie se rebelan ante la dirigencia de Pachakutik
La división entre los dirigentes del movimiento indígena quedó evidenciada ayer en la reunión convocada por Pachakutik (PK) y que pretendía consolidar a las fuerzas políticas de oposición al Gobierno. La cita terminó en altercados.
El encuentro, desarrollado en la sede de la agrupación política, fue breve ante el reclamo de las bases que acompañaron al presidente de la Conaie, Jorge Herrera. Eso impidió concretar el diálogo plural que planeó la coordinadora de PK, Fanny Campos, desde inicios de año, y que contaba con el apoyo del prefecto de Zamora, Salvador Quishpe.
Los primeros en ingresar fueron Gilmar Gutiérrez, del Partido Sociedad Patriótica (PSP); Guillermo Celi, de SUMA; y Diego Salgado y César Monge, del Movimiento CREO. A ellos se sumaron el exalcalde de Quito, Paco Moncayo; el líder de Concertación, César Montúfar; el exlegislador de Alianza PAIS, César Rodríguez; el exalcalde de Otavalo, Auqui Tituaña; la viceprefecta de Loja, Nívea Vélez; y el expresidente de la Federación Médica, Carlos Figueroa.
Todos registraron su ingreso y afirmaron que la cita era para aportar ideas y armar una agenda para sacar al país de la crisis económica y política. Paralelamente, desde el parque El Arbolito llegaron los líderes de la Conaie y de la Ecuarunari, Carlos Pérez Guartambel, acompañados por representantes sindicales como Nelson Erazo, Pablo Serrano y la exlegisladora de PK, Diana Atamaint con la consigna “¡Fuera, derecha, fuera!”.
Los “representantes de la derecha”, como los calificó la Conaie, se mostraron sorprendidos ante la demanda de las bases indígenas. La dirigencia de PK los ubicó en una segunda fila de la mesa principal.
El salón plenario pronto se convirtió en un escenario de posturas encontradas, ante lo cual Quishpe, con micrófono en mano, intentaba calmar a los asistentes. Sus palabras no tuvieron eco y con gritos y consignas en contra de “la derecha” le impidieron hablar.
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Suerte similar corrió el prefecto de Morona Santiago, Marcelino Chumpi, quien no alcanzó a intervenir, al ser recibido con silbidos y abucheos. Las bases de la Conaie cuestionaron con gritos su postura política, después de que la semana anterior participara en la ‘Unidad’ del alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot; el prefecto de Azuay, Paúl Carrasco; el presidente de Avanza, Ramiro González, etc.
Con las mismas dificultades ingresó al salón la legisladora de Madera de Guerrero, Cristina Reyes. Las bases indígenas le negaron el paso.
Herrera se dirigió a los asistentes para exigir que se renueve la directiva de PK y retirar del cargo a Fanny Campos. Propuso elecciones internas para el próximo 5 de marzo, en un congreso nacional.
Pérez Guartambel reiteró su desacuerdo con la reunión. “No estamos en contra de los invitados, que a lo mejor algún rato cuando la asamblea lo decida se puede dialogar, pero lo que se acordó (el 28 de diciembre) fue reunirse con los sectores afines y los afines son los trabajadores, los maestros...”.
Apenas 50 minutos duró el encuentro. En medio de discrepancias, gritos y acusaciones, el dirigente amazónico Marlon Santi suspendió el evento. Pero anticipó que las bases amazónicas piensan crear un propio colectivo.
Aquello dejó un mal sabor de boca entre los dirigentes políticos. Gutiérrez lamentó que se haya boicoteado el encuentro, mientras que Monge, Celi y Reyes consideraron que el movimiento indígena debe resolver sus discrepancias internas antes de volver a convocar a otras fuerzas políticas.
Así terminó el encuentro que había sido anunciado como el gran logro de la oposición. Pachakutik, el brazo político de la Conaie, va por su cuenta. (I)
Nebot se harta de que le pregunten por Lasso
A Nebot hoy lo hartaron. Está cansado de que le pregunten por qué Guillermo Lasso no está en la unidad que armó con Mauricio Rodas, Paúl Carrasco y Ramiro González. Fue en un diálogo con Alfredo Pinoargote en un canal de televisión.
La conversación se inició con la nostalgia de cuando el Partido Social Cristiano era la primera fuerza política del país. Luego de mostrar imágenes de 1998, el presentador le preguntó, ¿por qué no es candidato presidencial en 2017?
Molesto por unas declaraciones de Lasso en las que se quejaba por la falta de una invitación formal, el alcalde de Guayaquil contestó: “Las invitaciones públicas tienen mucho más valor que las privadas, porque en política unos dicen una cosa en público y otras en privado”.
De allí enumeró las veces que llamó a Lasso a sumarse (al menos 6), todas en 2015. Nebot se quejó por otra declaración de Lasso. El exbanquero supuestamente habría achacado a los socialcristianos su derrota en 2013.
“Voy a cerrar este capítulo. Yo estimo a Guillermo. No quiero dañar mi amistad personal con él , pero en política hay que ser claro. Si nosotros lo perjudicamos no cabe que lo apoyemos. De hoy en adelante cuando hablemos de unidad, no vuelva a preguntarme a mí, pregúntele a Guillermo Lasso”, le espetó visiblemente molesto a Pinoargote. “Bueno, se nos acabó el tiempo Jaime”, terminó Pinoargote la entrevista. (I)