Un grupo de colombianos residentes en el Ecuador realizaron esta tarde un plantón en la plaza Foch (norte de Quito). Están en contra del no en el plebiscito del domingo pasado. Por ello piden que llegue la paz al país. 

Con carteles con leyendas como "Paz para Colombia", "Cese del fuego permanente", "Unamos las voces por la paz", "Por una Colombia en Paz" pidieron que llegue un #Acuerdoya al país.

Según Laura Suárez, los residentes en el país se suman a la campaña #PazAlacalle. "Queremos unirnos a la convocatoria nacional e internacional de la sociedad civil  para apoyar el acuerdo de paz entre las FARC y el gobierno colombiano". Piden que siga el alto al fuego, que "sigan con los acuerdos ya de paz y que se planteen renegociaciones pero que no se pare el proceso de paz en Colombia".

Suárez señaló que el no en el plebiscito fue una sorpresa inmensa, "lo que pasó el domingo fue algo inesperado, creemos que hay esperanzas y que la sociedad civil juega un papel importante, tenemos la labor de construir nuestro país desde afuera".

De su lado, la colombiana Laura Lozano también acudió al plantón. Para ella, la paz es necesaria porque muchas vidas dependen de eso. "Fue un desconcierto saber que gran parte del país votó por el no, cuando es tan necesario para tantos muertos".

Lozano cree que ganó el no, "por una guerra mediática producto de 8 años del uribismo, en donde  se tergiversaron muchas cosas y se generaron todo un discurso guerrerista".  Para la mujer, en el nuevo acuerdo deben ingresar todos los sectores, "pero el acuerdo está bien planteado, el negociador bien lo dijo: que fue el mejor acuerdo posible".

Dijo que el decir que con la paz se cede tierra a la guerrilla -como señaló la oposición- demuestra el desconocimiento al acuerdo, "al leer los acuerdo, en el punto 1 es una reforma integral al campo y en ningún momento se habla de las FARC, ni se menciona, son medidas para mejorar el campo".

El criterio compartió la colombiana Karen Bustos, quien dijo que exigen al gobierno "que se siga con los acuerdos ya firmados, que siga el cese al fuego".

Bustos afirmó que llevan 52 años en un conflicto que cada vez produce más violencia y víctimas. "Tenemos la esperanza de que si se puede lograr la paz. El no  ganó por falta de información y pedagogía y porque hay los líderes de la oposición que quieren ser incluídos en las negociaciones".

Reconoce que un problema fue la abstención. "La gente votó por el no porque no vivió en carne propia el conflicto, mientras en las zonas rurales sí lo vivieron". 

Encendieron varias velas para pedir la paz. "Los colombianos en el exterior queremos la paz", dijo.

La politóloga colombiana Lina Caamacho cree que el no se debió a la falta de información que tiene la oposición en Colombia sobre los acuerdos. "Los opositores vienen haciendo las mismas propuestas que ya se tenía en un acuerdo de paz, que se viene trabajando por 4 años".

A su criterio, varios analistas atribuyen el no a la incapacidad de cierto sector en ese país de perdonar. "No es necesario un nuevo acuerdo. Este es el acuerdo. Cuando uno analiza qué proponen los opositores no hay propuestas".

Caamacho agregó que la mayoría que votó por el no debe proponer, "pero no hay propuestas para el cambio; queda un sinsabor de puedes oponerte, pero hazlo con propuestas claras, los llamados a la conciliación y al perdón fueron las víctimas que votaron mayoritariamente por el sí. Son las élites políticas las que terminan oponiéndose porque hay otros intereses".

Según  la politólogo hay intereses de procesar a los paramilitares. "En Colombia hemos tenido intentos de paz y este es el más cercano y estamos aquí porque creemos que es el acuerdo que más ha sido llevado más lejos; el solo hecho que las FARC haya firmado este acuerdo da como resultado un paso importante".

Acciones similares se realizaron en Londres y México. (I)