En los Fundamentos de autorregulación de la Ley de Comunicación (LOC), el inciso c) Promueve la calidad de la información; d) Establece un vínculo entre profesionales y ciudadanía sobre bases de confianza; e) Propicia el involucramiento de la ciudadanía como parte fundamental de la autorregulación; f) Fomenta la responsabilidad social de los medios; y, g) Respeta los derechos humanos de los trabajadores de la comunicación.

En lo que se refiere a la Ley Orgánica de Salud, el artículo 12 de la LOC establece que la comunicación social en salud estará orientada a desarrollar en la población hábitos y estilos de vida saludables, desestimular conductas nocivas, fomentar la igualdad entre los géneros, desarrollar conciencia sobre la importancia del autocuidado y la participación ciudadana en salud.

Los medios de comunicación social, en cumplimiento de lo previsto en la ley, asignarán espacios permanentes, sin costo para el Estado, para la difusión de programas y mensajes educativos e informativos en salud dirigidos a la población, de acuerdo a las producciones que obligatoriamente, para este efecto, elaborará y entregará trimestralmente la autoridad sanitaria nacional.

La autoridad sanitaria nacional regulará y controlará la difusión de programas o mensajes, para evitar que sus contenidos resulten nocivos para la salud física y psicológica de las personas, en especial de niños, niñas y adolescentes.

El Consejo de Comunicación aborda también recomendaciones de autoprotección, entre ellas, que se debe realizar el trabajo periodístico de manera segura a través de medidas de autoprotección, como el uso de indumentaria adecuada para acercarse a espacios de posible contagio, en contextos de emergencia sanitaria, evitar que las y los comunicadores pongan en riesgo su propia integridad durante una cobertura periodística.

El Comité para la Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) ha realizado una serie de recomendaciones para aplicar en caso de cobertura noticiosa durante emergencias relacionadas con enfermedades infectocontagiosas: Contar con buena salud. Si se presenta algún cuadro de salud deteriorada, no acuda a la cobertura; valorar la percepción del riesgo. Desarrollar la habilidad de detectar, identificar y reaccionar ante una situación de riesgo. (I)