Los funcionarios del Consejo Nacional Electoral (CNE) no tuvieron descanso en la jornada de ayer. Desde la mañana, el desfile de organizaciones sociales y políticas fue constante, con un objetivo: inscribirse para la campaña por una de las opciones a las siete preguntas de la consulta popular y referendo.

Los primeros en acudir a la sede del organismo electoral en Quito fueron los simpatizantes y dirigentes del movimiento SUMA, quienes dirigiéndose hacia el pleno del CNE llenaron el patio de ingreso con el color celeste.

La militancia, con banderas de la organización, proclamó el Sí a las siete preguntas.   

Mientras ellos se encontraban en uno de los departamentos, otra agrupación hacía su ingreso: se trataba de Fuerza Compromiso Social (FCS), cuyos miembros llenaron el auditorio para esperar a su líder, Iván Espinel.

Con el sonido de la música de murga, llegó el hasta ese momento Ministro de Inclusión Económica y Social, quien afirmó que acompañará a su movimiento en la campaña por el territorio.

Hablándole a la multitud se excusó diciendo que “estamos a las puertas de un proceso electoral que va a recuperar los temas sustanciales de la Constitución de 2008”.

Y otra vez volvió el correteo en la institución. Aún no salían los militantes de Fuerza Compromiso Social, cuando en el salón del pleno ya aguardaba Pachakutik para afirmar su respaldo a la consulta. No así al gobierno del presidente Lenín Moreno.

El siguiente en la lista fue Poder Ciudadano y a la cabeza estuvo el exasambleísta constituyente Diego Borja.

Las organizaciones sociales no se hicieron esperar, la Cámara de la Industria de la Construcción llegó hasta el órgano electoral para decirle Sí a la derogatoria de la Ley de Plusvalía. Junto a ellos estuvo el Colegio de Ingenieros Civiles del Ecuador.

Cerca del mediodía llegaron los delegados del Partido Socialista Ecuatoriano, también para apoyar la consulta, quienes liderados por el ministro Patricio Zambrano y la asambleísta Silvia Salgado, prometieron una exhaustiva campaña.   

En otras provincias la tónica se repetía dejando con trabajo al CNE.

La Central Unitaria de Trabajadores se sumó a las organizaciones que buscaron promover el Sí para la consulta popular. Su presidente, Oswaldo Chica, acudió ayer en la mañana a la delegación electoral del Guayas.

Esto pese a la disconformidad que existe en el interior, pues un grupo de integrantes, liderados por la primera vicepresidenta y asambleísta, Liliana Durán, no estaba de acuerdo con respaldar este proceso democrático. (I)