Tres días tiene Yasunidos, una vez que sean notificados, para impugnar la resolución del jueves pasado del Consejo Nacional Electoral (CNE), en donde se determinó que el colectivo no cumplió con el número de firmas (583.324) para someter a consulta popular la extracción petrolera del ITT. Hasta el cierre de esta edición, la organización aún no era notificada.

Paúl Salazar, vicepresidente del CNE, sostuvo que la organización puede presentar los recursos administrativos ante el CNE y el Tribunal Contencioso Electoral (TCE). “Estos empiezan a correr, una vez que sean notificados oficialmente”, enfatizó.

El organismo está dispuesto a entregar la información que Yasunidos necesite, siempre y cuando presenten un recurso administrativo respectivo. “Encantados de entregarles; dentro del marco de transparencia les vamos a entregar la documentación respectiva”, acotó.

ElCNEva a realizar “un análisis casa adentro de acuerdo a la forma como se dieron y llenaron los formularios, con el objetivo de determinar si simplemente se trató de una irresponsabilidad, falta de control, y en el caso de que se sospeche que efectivamente hay un intento descarado de engañar, presuntamente falsificar las voluntades de los ciudadanos, en ese instante, vamos a enviar la información con los documentos respectivos a la Fiscalía”.

En el informe técnico-jurídico de Yasunidos, el CNE detectó 32.838 firmas repetidas, además de copias de licencias de conducir, en vez de cédulas de identidad, así como nombres ficticios de cantantes como Marc Anthony y Julio Jaramillo y de personajes de películas como Bruce Wayne (Batman) y Dark Vader, en alusión a Darth Vader, del filme Star Wars.

El consejero Juan Pablo Pozo manifestó que en este proceso “no hay enemigos ni amigos de la democracia, cumplimos nuestros roles”.

Hasta el jueves, Yasunidos no había presentado ningún recurso de apelación, ni ante la Corte Constitucional ni ante el TCE. Pozo recordó que los integrantes del colectivo fueron capacitados, con base a los reglamentos y leyes del organismo electoral, y que jamás impugnó los formatos establecidos. “Lo que tenemos son actores mediatizando, sin entrar en lo que en derecho corresponde”, precisó.

Para él, el CNE debería analizar los protocolos y reglamentos para determinar si lo que compete al formato y tipo de papel es un asunto restrictivo o no. “Los observadores de Yasunidos fueron capacitados con los protocolos y en ese momento debieron sugerir la inconstitucionalidad técnica y profesional; pero Yasunidos no lo hizo”, recordó.

Pozo propone que para futuras solicitudes de recolección de firmas, el CNE podría realizar convenios con instituciones públicas como el Registro Civil, con el objetivo de que a futuro se realice la revisión de huellas y ya no de firmas.

La consejera Roxana Silva precisó que el CNE no es una entidad de investigación, “no somos jueces”. A su criterio, Yasunidos tuvo problemas en la recolección de firmas por un desconocimiento de la norma prevista.

Tras la resolución del CNE, Yasunidos fue la segunda organización que no pudo reunir las firmas necesarias para someter a consulta popular la explotación del ITT.

El Frente de Defensa de la Amazonía, que planteaba la eliminación de cualquier proceso extractivista, fue la primera organización rechazada, con 267.312 firmas.

Sin embargo, aún queda un tercer movimiento: Amazonía Vive, que recoge firmas en apoyo a la extracción petrolera en el Yasuní ITT. La organización debe hasta julio entregar las firmas al CNE.

Ese colectivo está liderado por los alcaldes de la Amazonía (algunos de ellos dejarán el cargo la próxima semana) que necesitan los recurso del petróleo para financiar obras de saneamiento. A ellos se han unidos sindicatos y otras agrupaciones cercanas al Gobierno.

COLECTIVO INSISTE EN DENUNCIAS

Gabriela Ruales, integrante del colectivo Yasunidos, informó que hoy en Quito se realizará una concentración de militantes ‘a puertas cerradas’ para determinar las acciones nacionales e internacionales que emprenderán.

Fabricio Astudillo, otro de los voceros, destacó que aún no descartan demandas en tribunales extranjeros.

Ayer la organización lanzó la campaña ‘Democracia en extinción’, que aparecerá en redes sociales; además plantean movilizaciones en las calles, así como talleres en provincias como parte de un proceso de reflexión colectivo. “No entendemos la guerra sistemática en nuestra contra (..) estamos indignados con la criminalización de la protesta social”, manifestó Ruales.

Pedro Bermeo, representante de Yasunidos, denunció ayer varias irregularidades. Dijo que los observadores del colectivo encontraron varias inconsistencias por parte del CNE, entre ellas, unos presuntos formularios en blanco, sin codificación, que habrían sido atribuidos a Yasunidos por parte del CNE. “Y no entendemos cómo, porque los formularios fueron numerados en nuestra presencia y luego aparecen estos en blanco”, dijo.

A criterio de Bermeo, los grafólogos tomaron 3 decisiones de las firmas en un minuto, mientras que grafólogos de la organización argumentan que revisar una firma toma 15 días. Rechazó que varios de los formularios fueron eliminados por problemas en el formato.