La Armada Nacional ascendió al grado de contralmirantes a los oficiales Brumel Vásquez, Jhon Merlo y César Pérez en una ceremonia de honor realizada la tarde de este viernes en la Comandancia de la Escuadra Naval de Guayaquil con la presencia del ministro de Defensa, Patricio Zambrano, y demás autoridades civiles y militares.

Luego de la lectura del decreto ejecutivo, el Ministro efectuó la imposición de palas y la entrega de bastón de mando. Posteriormente, se dio la arreada e izada de insignias.

Vásquez, en representación de los ascendidos, ofreció unas palabras de gratitud citando un poema de Calderón de la Barca que sostiene que "no adorna el vestido al pecho, que el pecho adorna al vestido y así, de modestia llenos, a los más viejos verás tratando de ser lo más y de aparentar lo menos. Aquí la más principal hazaña es obedecer y el modo cómo ha de ser es ni pedir ni rehusar", describiendo así al soldado que pervive a lo largo de los tiempos al hallar el sentido de la vida en el amor a la Patria. 

Asimismo, el flamante Contralmirante memoró que fue parte de un grupo de 84 jóvenes que ingresó con la ilusión de servir en la Armada hace 33 años, a pesar del alejamiento por largo tiempo de su hogar y las largas horas de estudio.

Instó al Estado a atender las necesidades de la institución e "impedir que ocurra una pérdida lamentable como la tragedia del submarino San Juan de la Armada argentina en que mientras esas 44 almas estaban cuidando a su Patria, parece que esa Patria no estaba cuidando  bien a esas almas". 

El Ministro declaró que "vamos a hacer inversión -cuantiosa- en lo que se refiere a la recuperación del material de Fuerza Armadas" para potenciar las capacidades actuales.

Por su parte, el Comandante General de la Armada, Renán Ruiz Cornejo, sostuvo en su discurso que "un marino de guerra es un caballero de mar". Aprovechó para recordar que durante el 2017 la Armada capturó 20 toneladas de sustancias sujetas a fiscalización, 84 operaciones de salvataje y evacuación euromédica en nuestros espacios acuáticos.

Ruiz Cornejo mencionó que entre las cualidades y virtudes que acompañan a los marinos destacan el honor, la disciplina y la lealtad.

"Una onza de lealtad vale más que una libra de talento. Y jamás den rienda suelta a la maldad que albergue en su corazón. Son estos los principios y virtudes que una sociedad justa, ahora más que nunca reclama y demanda de sus miembros", enfatizó. (I)