Santa Cruz - Guayaquil.-

El G77 y China perfilarán en Bolivia una agenda de desarrollo ‘post 2015’ para reactivar la lucha contra la pobreza y el hambre, la cooperación y la protección medioambiental, que sucederá a los Objetivos de Desarrollo del Milenio que el mundo se comprometió a cumplir hasta ese año.

Bolivia, que preside este año el G77, inaugura hoy la cumbre para celebrar los 50 años del bloque que reúne a 133 países. La nueva agenda tendrá en Santa Cruz la unificación del criterio de casi 2 tercios de las naciones del mundo. El documento será el primer borrador de la agenda post Milenio.

La declaración se mantiene en reserva, pero abordará la erradicación de la pobreza y el hambre en los países del Sur, la lucha contra la desigualdad, el desarrollo integral en equilibrio con la Madre Tierra, el cambio climático, una nueva arquitectura financiera, el comercio justo y la cooperación y la integración de los pueblos. También aludirá a la transferencia de tecnología al servicio de los pueblos, la seguridad alimentaria, la soberanía sobre los recursos naturales y la creación de nuevas instituciones.

Estos son asuntos que propuso el presidente Evo Morales al asumir la presidencia del G77. Hasta el momento han confirmado su asistencia a la cita 94 delegaciones, de las que 27 estarán encabezadas por presidentes, 3 por vicepresidentes y 4 por primeros ministros.

Como anfitriona, Bolivia fue la responsable de elaborar el documento base para el debate, que fue modificado en las consultas para alcanzar un consenso absoluto “hasta en las comas”, como exige la tradición del G77. “Se elaboró el borrador, se lo ha corregido mucho, pero se ha mantenido buena parte del espíritu progresista de este documento”, reconoció el vicepresidente boliviano Álvaro García Linera.

El embajador adjunto ante la ONU y organizador de la cita, Reymi Ferreira, señaló en las últimas horas que confía en que el número de las delegaciones llegue a 100, aunque en este momento “ya se han superado las expectativas” pese a que el evento fue organizado en solo 5 meses. A la última Cumbre del G77, la Cumbre del Sur celebrada en Catar en 2005, asistieron 20 presidentes y alrededor de 70 delegaciones gubernamentales.

Este viernes ya empezaron a llegar mandatarios y delegaciones extranjeros. El arribo se produjo bajo un fuerte aguacero, aunque en la zona del aeropuerto de Viru Viru, las precipitaciones fueron menos fuertes que hacia el centro de la ciudad. Allí  buena parte del transporte público se retiró ante la imposibilidad de transitar por algunas calles.

Los últimos que llegaron ayer a Santa Cruz fueron el presidente de Zimbabwe, Robert Gabriel Mugabe, y de Cuba, Raúl Castro. Previamente aterrizó el mandatario de Sri Lanka, Mahinda Rajapaksa.

La ministra de Comunicación boliviana, Amanda Dávila, espera recibir a 36 gobernantes. La sede oficial de la cumbre será el recinto ferial Fexpocruz (Santa Cruz), cuyas calles aledañas permanecieron bajo las aguas debido a la intensa lluvia.

BOLIVIA INAUGURA OBRAS DE INFRAESTRUCTURA

Durante esta semana, una legión de 3.000 obreros ha trabajado sin descanso para acondicionar los escenarios en los que se desarrollará la Cumbre del G77.

La treintena de jefes de Estado estrenarán, en el aeropuerto de Viru Viru, una sección especial para gobernantes de 540 metros cuadrados con 3 salas VIP y una plataforma de 7.000 metros para las aeronaves.

En ese mismo aeropuerto también se ha construido una terminal aérea de 1.000 metros cuadrados, destinada exclusivamente para la llegada de las delegaciones y una plataforma de carga.

Ya en la ciudad, los invitados transitarán por la recién construida avenida G77, en la que se han invertido $ 7,5 millones de y que unirá los municipios de Warnes y Santa Cruz de la Sierra.

En estas obras se han invertido, según fuentes oficiales, unos $ 23 millones. Además se han comprado helicópteros para las labores de seguridad, capítulo para el que también se han desplazado a Santa Cruz 4.500 policías de otros lugares del país.