Una nueva baja sufrió el gabinete de Gobierno en solo 24 horas. El lunes Eduardo Mangas salió de la Secretaría de la Presidencia y ayer fue el turno de Iván Espinel, quien anunció su renuncia al Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES). Espinel lo informó durante la inscripción de su movimiento Fuerza Compromiso Social, en el Consejo Nacional Electoral (CNE) para participar en la campaña a favor del sí en la consulta. Previamente en Twitter, escribió: “Hemos tomado la decisión de dar un paso al costado para apoyar y liderar con convicción al Sí en la Consulta Popular junto a mi familia Compromiso Social. ¡Todo por la patria, nada sin ella!”. La Secretaría de Comunicación corroboró la noticia. “El Gobierno Nacional informa que Iván Espinel renunció”, comunicó la entidad. Y agregó: “El Ejecutivo expresa su reconocimiento por los servicios prestados al país durante el ejercicio del cargo”. Aún no se nombra a su reemplazo. El exministro en las últimas semanas fue blanco de ataques, especialmente del excandidato presidencial por Fuerza Ecuador (FE), Abdalá Bucaram Pulley y la asambleísta del movimiento CREO, Ana Galarza. Ambos, en diferentes escenarios, aseguraron que sobre Espinel existen informes de la Contraloría General del Estado que establecen responsabilidades civiles y penales, cuando estuvo a cargo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) en la provincia de Guayas. Incluso la legisladora, mediante un comunicado dirigido al presidente Lenín Moreno, le pidió que destituya a Espinel de su cargo. En tanto que Bucaram Pulley acudió en días pasados a la Fiscalía General del Estado, con la finalidad de solicitar una investigación. Durante ese tiempo, el exministro rechazó las acusaciones y hasta expresó que todo aquello se trataba de un show político porque no existe una sustentación jurídica. “Esos informes son una presunción, no estamos hablando de un perjuicio como tal”. La polémica giró en torno a un préstamo que hizo el político para comprar su casa en Guayaquil. (I)