Cuando hablamos de finanzas personales, hay que tomar en consideración que los gastos no pueden exceder los ingresos y destinar siempre una parte de estos últimos al ahorro.

Salvo que esté endeudado, las demás razones que tenga para no guardar dinero son solo pretextos. "Siempre podemos destinar una pequeña parte de nuestros ingresos al ahorro si tenemos la voluntad de hacerlo", apunta el analista económico Roberto Villacreses. 

Las claves: compromiso y disciplina. Para ahorrar es importante primero establecer prioridades en el presupuesto y eliminar los gastos innecesarios. Hay una línea muy delgada entre lo que se necesita y se desea. "Puedo, por ejemplo, dejar de tener el último teléfono celular o dejar de salir varias veces a la semana al cine". 

La recomendación de los expertos es asignar al ahorro entre un 10 y 15 por ciento de los ingresos. "Es decir, que si una persona gana 1.000 dólares, puede destinar 100 de esos 1.000 todos los meses".

El segundo paso es trazar metas, sean estas de corto, mediano o largo plazo. Por ejemplo: comprar una casa, un viaje, estudios; o crear un fondo de jubilación o de retiro.

Un estudio realizado en 2015 por el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) reveló que el 41% de la población nacional no ahorra y, cuando lo hace, prefiere hacerlo en casa o mediante modalidades informales. 

Por ello, una vez que haya definido sus objetivos, tome en cuenta las ofertas del sistema financiero que le generen intereses y permitan el retiro solo cuando se cumpla un tiempo de permanencia mínima. Busque una institución segura, regulada por la Superintendencia de Bancos.

Ahora los bancos ofrecen distintos productos y de acuerdo a sus metas. Los hay, incluso, aquellos que incentivan a los niños a tener una cultura de ahorro. Los montos van desde $1. 

Pero ahorrar también requiere de paciencia. Villacreses señala que, una vez que haya acumulado una cantidad considerable de dinero, podría pensar en otras opciones. "Cuando este monto esté un poquito más grande, ese dinero invertirlo en pólizas de acumulación, que compromete a dejar esa cuenta congelada y, dependiendo del tiempo, la tasa de interés va a ir cambiando un poco. Si retiras antes de la fecha, te penalizan". 

Otra opción es ir a la bolsa de valores y "comprar títulos de empresas que aseguran una rentabilidad promedio si uno diversifica bien el riesgo". 

Villacreses recalca que "siempre podemos ahorrar y nunca es tarde" para tener ese "colchón" y una vida "cómoda" a futuro. (I)