La organización mundial de la salud presenta una encuesta de los 50 implementos más indispensables
De 10 personas, solo una tiene acceso a un producto de apoyo
Pasamanos, barras de apoyo, alarmas, accesorios y sillas de ruedas, ayudas para memorización, parlantes, bastones, lentes, prótesis, sillas de ruedas, muletas, andadores…, son apenas una parte de los dispositivos más importantes que requieren los adultos mayores y personas con discapacidad para mejorar su calidad de vida.
En el planeta existe un déficit de estos dispositivos de audición, movilidad, visión, comunicación, cognición y entorno. La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala cifras dramáticas al respecto: “En la actualidad necesitamos más de 1.000 millones de productos de apoyo y se espera que hasta 2.000 millones para 2050. Hoy en día solo una de cada 10 personas que los necesitan tiene acceso a un producto de apoyo (AP)”.
Los 1.000 millones coinciden con el número de personas con discapacidad que existe actualmente en el mundo. De ellas, casi 200 millones experimentan dificultades considerables en su funcionamiento.
De igual manera, las proyecciones de la OMS coinciden con el número de adultos mayores. Entre 2000 y 2050, la proporción de los habitantes del planeta mayores de 60 años se duplicará del 11% al 22%. En números absolutos, este grupo de edad pasará de 605 millones a 2.000 millones en el transcurso de medio siglo. El cambio demográfico será más rápido e intenso en los países de ingresos bajos y medianos.
Los datos de la Organización Mundial de la Salud no diferencian los países en desarrollo y con economías prósperas. Posiblemente, en este sentido las cifras deben variar considerablemente. Incluso en un mismo país, si se toma en cuenta las zonas urbanas frente a las rurales.
Por ejemplo, en el cantón Pedro Moncayo, provincia de Pichincha, el Municipio de este lugar lleva adelante un proyecto con 200 personas adultas mayores (el 85% son mujeres). En una evaluación preliminar se determinó que cerca de 160 personas requieren de algún tipo de dispositivo de audición, movilidad, visión, comunicación, cognición o entorno, situación que agrava más su calidad de vida.
La posibilidad de conseguir un dispositivo se limita a las ayudas desde el Estado. Este es el caso de Segundo Francisco Pila. Tiene 74 años y vive en la comunidad San José Grande perteneciente a Tabacundo. Hace más de 10 años utiliza dispositivos para mejorar su audición, pero actualmente no le sirven de mucho porque sufrieron un daño y no cuenta con medios económicos para adquirir otros.
En el sector rural y también en el urbano, los adultos mayores y personas con discapacidad no cuentan con ayudas que mejoren su vida. En las viviendas, por ejemplo, están ausentes rampas en los accesos, peor aún barras de agarre en los baños o un asiento especial en la ducha.
No sorprende, lamentablemente, mirar a adultos mayores utilizando un pedazo de madera como bastón. Peor aún imaginar en zapatos ortopédicos para quienes los necesiten con urgencia.
Con el propósito de cambiar este escenario, la Organización Mundial de la Salud lleva adelante un Modelo de Lista de Productos de Apoyo Prioritarios (APL), basado en el éxito y el aprendizaje derivado de la Lista de Medicamentos Esenciales (EML), para ayudar a los Estados Miembros en la planificación de políticas y programas relacionados con la provisión de AP.
Al igual que con la EML, el objetivo principal de esta iniciativa es mejorar el acceso a productos de apoyo asequibles y de alta calidad. Con este fin, la OMS está liderando un sondeo mundial para identificar los 50 Productos de Apoyo Más Prioritarios.
La encuesta servirá para elaborar la primera lista de la Organización Mundial de la Salud sobre tecnologías de asistencia esenciales, que los gobiernos podrán utilizar para planificar la adquisición de los productos prioritarios que mejoren la vida cotidiana de los adultos mayores y las personas con discapacidad.
Por esta razón se invita a participar en este sondeo a todos los profesionales implicados, principalmente a los usuarios y potenciales usuarios o los miembros de sus familias y organizaciones.
La Organización Mundial de la Salud busca a través de la encuesta mundial, además, recoger opiniones sobre las tecnologías de asistencia más necesarias y útiles, como los audífonos o las sillas de ruedas.
Estos instrumentos prácticos, con tecnologías simples unos y complejas otros, son cada vez más necesarios para personas de los países de ingresos altos y medianos cuya vida es cada vez más larga gracias a una mejor atención sanitaria.
Las personas con discapacidad también utilizan dispositivos similares, que les permiten vivir con mayor autonomía y participar en las actividades de sus comunidades.
Esos instrumentos todavía no son fácilmente accesibles para todo el mundo. El objetivo es aumentar el acceso a las tecnologías de asistencia a los 1.000 millones de personas que las necesitan y a los 1.500 millones que las demandarán en 2030.
Para conocer a lista de dispositivos de apoyo prioritario puede ingresar a la página www.who.int/features/2016/assistive-technologies/es/. (I)