Recorrer los senderos de montañas, parques y montes en una bicicleta impulsada por las manos fue lo que motivó al andinista ecuatoriano Sebastián Carrasco -quien perdió la movilidad de las piernas en un accidente con cuerdas en 2015- a promover la implementación de rutas accesibles para las personas con discapacidad.

“Esta iniciativa surgió al ver que hay pocos lugares en los que uno puede salir, entonces nos juntamos con Gisela Toledo, directora del proyecto, y nos propusimos cambiar esta situación para que sea inclusivo para todos”, señaló Carrasco, quien además, para el próximo año, planea escalar el Kilimanjaro en su vehículo adaptado.

El proyecto, que tiene el nombre de One More Summit (Una Cumbre Más), incluye crear tres caminos inclusivos al finalizar el año en sectores aledaños a Quito, como Yunguilla, ubicado a una hora de la capital, el Parque Metropolitano y otro en el sur de la ciudad.   

Además de la construcción de senderos, Carrasco también trabaja en la fabricación de las bicicletas, que en el mercado internacional tienen un costo de $ 15.000, por lo que a través de la fundación Sebastián Carrasco Zuffi esperan fabricarlas en el país y para diciembre tener unas 9 o 10. “Que sean más accesibles para todos y poder hacer salidas a las montañas”, dijo el deportista.

Mientras impulsa la participación de más deportistas con discapacidad en el ciclismo de montaña, el escalador quiteño, de 37 años, planifica su nuevo reto: subir en su bicicleta y sin ayuda el Kilimanjaro, la montaña más alta de África (5.891 msnm), en septiembre de 2019.

“Después del accidente tenía el sueño de volver a la montaña y al ver que con una bicicleta se podía, nos propusimos llegar a la cima. Varias personas han tocado la cumbre, pero los han cargado, nosotros queremos hacerlo con la bici”, dijo Sebastián, quien practica el montañismo desde los 12 años. (I)