Redacción Regional Sur.-

No hay otro evento deportivo en Cuenca que genere tanta atención como el ‘Mundialito de los Pobres’. Los barrios se preparan con meses de antelación para acudir a la cita deportiva que es organizada por el Amistad Club.   

Se lo disputa hace 41 años y el entusiasmo no ha decaído entre los participantes. Por el contrario, cada vez surgen nuevas propuestas y más equipos quieren participar. El torneo empezó a jugarse en 1974 con 12 equipos, pero este año se inscribieron 36 barrios para formar parte de esta fiesta deportiva.

Hasta el 2005 el ‘Mundialito’ se jugaba en la cancha del colegio Febres Cordero, un local que para muchos jugadores era muy duro, porque se practicaba en cancha de cemento. “Jugar allí era cosa seria”, dice Galo Sánchez, exponente que ha defendido los colores de El Padrón, Patamarca y El Vergel.  

Luego y paulatinamente fueron cambiando de sede, llegaron hasta el coliseo Mayor de Deportes hoy llamado Jefferson Pérez. “Aquí hay más seguridad y con mayor capacidad para los aficionados”, señala el presidente del Amistad Club, Patricio Astudillo.

Pero  el indor fútbol no solo es la pasión para un cierto sector, alrededor del ‘Mundialito de los Pobres’ giran muchas personas. El comercio informal crece durante este mes, las ventas van desde comidas, pasando por la reventa de entradas, es todo un movimiento económico. “En este mes ya sacamos dinerito para las vacaciones”, señala Rocío Tene, una mujer que no le importa la noche y el frío para vender sus salchipapas en las afueras del coliseo. También están los ‘franeleros’, quienes se “adueñan” de las calles ante el malestar de los vecinos del barrio, quienes constantemente les piden que no tapen sus garajes.  

Los ‘mecenas’ de los barrios

Según Humberto Sanpedro, dirigente barrial y que ganó con sus equipos cinco campeonatos, hay que tener dinero, paciencia y muchas amistades para conformar y organizar un equipo de fútbol y mucho más si va a intervenir en un certamen de esta magnitud.

Para Sanpedro, las cosas han ido cambiando paulatinamente y el campeonato se ha convertido en un evento donde hay que poner dinero para lograr un buen sitio en la tabla de posiciones.

“Antes los jugadores iban por la camiseta, por el barrio y por hacer deporte, hoy ya cobran para jugar el torneo y eso le cuesta al dirigente”, dijo. Sanpedro ha ganado títulos con el barrio Bosque de Monay, Patamarca y tres campeonatos con el barrio de Todos Santos. “Los vecinos del barrio son lo que ayudan, pero eso no aguanta, hay que acudir a las empresas privadas para que ayuden económicamente y poner en la camiseta la firma auspiciadora”, señala el dirigente que este año no pudo estar en el evento por una enfermedad.

Los jugadores más buscados

Para muchos futbolistas, este campeonato les deja réditos económicos. Si bien algunos se acoplan a lo que tiene el barrio, otros imponen sus propias condiciones.

Hay jugadores que son buscados por los dirigentes para que jueguen por su barrio, pero eso les representa dinero. Según Galo Sánchez, el promedio que cobra un jugador por participar en todo el torneo es de $ 150, pero si es élite el costo para los dirigentes es de $ 400, y si es súper élite tienen que pagarle al deportista entre $ 700 y $ 800, pues creen los dirigentes que una contratación de estas puede darle el título a su barrio. Pero a más del pago al futbolista, deben darle movilización, uniforme, incluidos los zapatos y si es contratación ‘foránea’ deben incluir el hospedaje durante todo el torneo.  

“Antes eran grupos de amigos que nos organizábamos para jugar, ahora se busca ser campeones a toda costa, bajo el costo que sea”, señala Sánchez.

El ‘negro’ Lema es uno de los futbolistas más buscados para este torneo, es requerido por diferentes barrios, al igual que Eddy Meza, la ‘Mula’ Ruiz o Wilo Barreto, jugadores que han pasado por varios equipos. “Algunos de los futbolistas solo esperan que llegue este torneo para tener sus ingresos económicos”, señala Humberto Sanpedro y agrega que para tener un buen cuadro se necesita unos $ 3 mil, pero si en verdad quiere ser campeón, unos $ 9 mil, “es decir, le cuesta más que los premios que dan”, indica. (I)

Un torneo inspirado en las vacaciones

Este torneo nació hace 41 años en Cuenca. El Amistad  Club tomó a su cargo el evento deportivo aprovechando la época de las vacaciones escolares.  

“Ya llegan las vacaciones de los pobres”, decían los integrantes del Club y de pronto organizaron eventos barriales de indor fútbol que de a poco fueron creciendo en la ciudad. “Luis Chiriboga, del Amistad Club, hizo una combinación entre vacaciones y los pobres y como en ese entonces se jugaba el mundial de Inglaterra, se puso mundialito de los pobres”, dijo el presidente del Amistad Club, Patricio Astudillo.       

La organización del torneo tiene un costo que supera los $ 70 mil, según Astudillo, ya que solo el alquiler del  coliseo tiene un valor de $ 35 mil para todo el campeonato. “No es un negocio, como muchos dicen, más bien es una inversión para que los cuencanos disfruten del evento”. Astudillo señala que hasta los costos de los árbitros han subido en los últimos años: “Solo en ellos tenemos que hacer un desembolso de 7 mil dólares”.

El “Mundialito de los Pobres ha tenido tanta acogida entre los barrios de Cuenca que los organizadores ahora están pensado ampliar el cupo para los equipos. En el actual torneo están participando 36 barrios, pero Astudillo indica que no se descarta que para los próximos eventos puedan participan hasta 40, esto dependerá de un estudio que van a realizar próximamente.

El premio que entregan al campeón es de $ 7 mil, más un uniforme completo para sus jugadores para el próximo torneo y medallas bañadas en oro. Los equipos son escogidos de acuerdo a su ubicación al final del torneo, mediante solicitud al Amistad Club y también invitación a los barrios tradicionales de Cuenca. (I)