Juan Carlos Pozo no sabía si llorar o reír. Ganar la versión 34 de la Vuelta Ciclística al Ecuador no estaba en sus planes, pero un accidente del líder general, Richard Carapaz, le otorgó la victoria por, apenas, un segundo de diferencia.

En aquella mirada, que fusionó sorpresa y emoción, pasaron los 10 años de sacrificios dedicados al pedalismo de ruta. Hasta el sábado anterior, sus máximos triunfos fueron la medalla de plata en el Campeonato Juvenil Panamericano ‘Cuenca 2008’, el segundo lugar en los premios de montaña de la Vuelta Ciclística al Ecuador de 2013 y el tercer puesto de la clasificación final en el mismo torneo.

Su triunfo no programado le permitió por primera vez subir a la grada más alta del podio en un torneo absoluto de carácter nacional. “No imaginaba quedar primero, mi compañero (Richard Carapaz) llegó en calidad de líder. Yo estaba a 16 segundos de él, pero le pasó ese accidente en el circuito. Son cosas de la vida”, comentó Pozo.

El accidente de Carapaz se produjo en el último de los 25 giros que debían dar los exponentes en el circuito de  64,1 kilómetros por el Centro Histórico de Quito. Este trazado se constituyó en la décima y definitiva etapa del certamen, que en su totalidad abarcó 1.263,6 kilómetros, en 10 fases de recorrido.

Pero la caída de Carapaz no fue lo único que propició la victoria de Pozo. En uno de los tramos del sexto enlace, Riobamba-Macas, la bicicleta del carchense pinchó y, para evitar que perdiera tiempo, su compañero de equipo, Pablo Caicedo Romo, le cedió el implemento, permitiéndole continuar en el lote.

La muestra de compañerismo se dibujó como una especie de preludio en la mente de Juan Carlos. Nada ni nadie podría impedir que termine la justa. Eso, sumado al infortunio de Carapaz -otro de sus compañeros de conjunto- le sirvió para levantar el cetro.

“Por fortuna, Carapaz y Pozo son de la plantilla de Panavial, al igual que mi hijo. Siempre les he dicho que ser solidarios nos ayudará a salir adelante a todos. Sea con Richard o con Juan hubiéramos festejado el primer puesto para el Carchi”, precisó el entrenador Pablo Caicedo Revelo.

El percance de Carapaz estrechó los tiempos, al punto que en un principio se lo dio como vencedor, pero minutos después los jueces adjudicaron la corona a Pozo, quien terminó la lid en 29h46m28s.

“Es un premio a la constancia. Ahora me gustaría vincularme a un equipo colombiano, porque en Colombia el nivel es muy alto, y después proyectarme a Europa”, pronunció Pozo, quien a sus 24 años alterna la práctica deportiva con la agricultura.

Este logro se lo tributa a sus padres, José Pozo y Lidia Pozo, a sus hermanos Orlando y Marco, a Carchi y a Sucumbíos, provincia donde reside y está federado. “Nací en San Gabriel, pero vivo en Cocha Seca. Son sitios que me han dado mucho”, citó tras posar con su trofeo.

El DT Caicedo, en tanto, dijo que este resultado se debe en parte a la humildad de Juan Carlos. Un chico callado y tímido que se expresa mejor cuando está sobre el ‘caballito metálico’. Ahí descarga todo.