Algarabía, nervios, tristeza... son emociones que se mezclan en la vigésima versión de los Juegos Nacionales de Olimpiadas Especiales Ecuador, que reúnen a cerca de 1.000 exponentes con discapacidad intelectual.

Las justas que se libran son atletismo, ciclismo, tenis de campo, gimnasia, levantamiento de potencia, natación y fútbol femenino unificado.

Los deportistas, provenientes de 21 provincias, están alojados y compiten en las instalaciones de la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro, ubicada en Parcayacu.

Entre los deportistas más destacados está el azuayo Juan Pugo, quien ayer se adjudicó la medalla de oro en la prueba de los 5.000 metros de atletismo. 

El año pasado en los Juegos Latinoamericanos de Panamá, Pugo obtuvo dos preseas de oro, triunfó en los 3.000 y   5.000 metros.

De quien también se espera mucho es de la manabita Karen Pilozo, una de las mejores en gimnasia rítmica. Habitualmente compite con pelota, esclavas y haro.

La mantense ha intervenido en torneos internacionales. En 2015 estuvo en los Juegos Mundiales que se celebraron en Los Ángeles (Estados Unidos), donde obtuvo dos preseas de bronce. En 2017 participó en los Juegos Latinoamericanos, donde logró dos galardones, uno de oro y otro de plata.

Esteban Navarrete, director nacional de deportes de Olimpiadas Especiales, manifestó que la importancia de las lides locales radica en ser selectivas para los Juegos Mundiales que se realizarán en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos), del 14 al 21 de marzo de 2019.

También se mostró satisfecho por la integración de las justas, pues la contienda de balompié femenil es unificada, o sea que permite la presencia de mujeres con discapacidad y convencionales en los equipos.

“Como es un campeonato de fútbol 7 el reglamento indica que cada elenco debe tener en cancha tres chicas convencionales”, explicó.

Hoy continuarán las finales de algunas pruebas, pero la jornada decisiva será el  miércoles. Mañana los participantes gozarán de una jornada recreativa. (I)