El COE pide una amplia investigación sobre casos de dopaje
El Comité Olímpico Ecuatoriano (COE) solicitó ayer formalmente a la Asociación Mundial Antidopaje que se “amplíen las investigaciones” sobre los casos de dopaje en los que están involucrados atletas rusos y solicitó que la muestra B de Valeriy Borchin, obtenida en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, sea evaluada nuevamente.
La solicitud, firmada por el presidente del COE, Augusto Morán, también se refiere a Vladimir Kanaykin, quien le arrebató el récord mundial en la prueba de los 20 kilómetros marcha a Jefferson Pérez. Enfatiza que el marchista ruso fue sancionado de por vida por las autoridades deportivas rusas.
El pedido del COE está sustentado en la regulación dictada por la Agencia Mundial Antidopaje, ya que el tiempo de vigencia para evaluaciones de la muestra B quedó establecido en 10 años. En ese sentido, el pedido ecuatoriano está en el período adecuado.
Morán explicó también que el motivo de la solicitud es debido a que tiene incidencias en el movimiento olímpico ecuatoriano y solicitó que el pedido sea tramitado a la brevedad posible. “El COE quedará expectante de los acontecimientos en este caso”, agregó.
El documento fue enviado con copia al Comité Ejecutivo de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA), a la ComisiónÉtica de esa entidad, a la Federación Internacional de Atletismo, la Comisión Técnica de la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF), a la Federación Ecuatoriana de Atletismo y el Ministerio del Deporte ecuatoriano.
El presidente delCOE señaló que se agotarán todas las instancias para aclarar el tema y que la medalla de oro le sea otorgada a Pérez, a quien le correspondería la presea si se sanciona a Borchin.
Borchin fue quien derrotó al ecuatoriano Jefferson Pérez en la prueba de los 20 kilómetros marcha en la cita olímpica en China y a quien la Agencia Rusa Antidopaje (Rusada) ya sancionó con 8 años.
Por ahora, el proceso está encaminado, pero para Pérez esto no será sencillo y tampoco se resolverá en poco tiempo. “No se trata de un caso en particular, de un atleta que dio positivo. Se trata de una red de dopaje en la que están vinculados deportistas, entrenadores, médicos, científicos y dirigentes. Al ser un sistema, genera que toda la cadena se vea afectada”, indicó.
Se espera que el resultado del informe esté listo a finales de febrero y luego restaría esperar la decisión del Comité Olímpico Internacional (COI) y la IAAF acerca del retiro de medallas y de récords que consiguieron los atletas rusos mediante el uso de sustancias prohibidas.
En ese sentido, la IAAF ya dio luces sobre lo que podría suceder, al mencionar que los títulos más importantes que estos deportistas lograron podrían ser redistribuidos.
El único medallista olímpico de Ecuador señaló que, de darse la sanción, cambiarán muchos resultados en las pruebas en los que los rusos lograron entrar en el podio. “Se alteraría el medallero. Por el bien del deporte mundial, aspiramos a que se realice una investigación profunda y que las sanciones sean un ejemplo para que no vuelvan a suceder estas situaciones en el deporte”.
En sus años como deportista activo, Pérez contó que muchos de sus compañeros de varios países ya especulaban con que el equipo ruso consumía sustancias prohibidas para mejorar su rendimiento. Incluso relató que la Federaciónde Atletismo de Rusia organizaba competencias exclusivas para deportistas de ese país, en las que llegaron a competir atletas sancionados previamente.
Hasta el momento el COI no ha emitido un pronunciamiento sobre el caso, al igual que la WADA, que son los organismos principales que llevarán adelante la investigación sobre el caso.
Pérez calificó a la situación como “triste”, pues Rusia es considerada una de las potencias mundiales en esta disciplina. “Es muy difícil asimilar que esto suceda, por lo que siempre representó Rusia en la marcha. Es triste para mí, incluso hasta hablar de esto”.
Se habla de un total de 23 deportistas de élite rusos que habrían utilizado sustancias prohibidas para conseguir un mejor rendimiento en las pruebas en las que participaron en los últimos años.
Una mancha en el prestigio de la escuela rusa
La escuela rusa de marcha es una de las más importantes del mundo por los logros que ha conseguido, sobre todo en los Juegos Olímpicos. La tradición marchista de los rusos llegó como herencia de la Unión Soviética, que fue la nación que dominó en las pruebas de marcha a partir de la inclusión de esta disciplina en los Juegos Olímpicos de Melbourne en 1956.
Luego de la separación de la Unión Soviética, a Rusia, como país, le costó destacar tanto en las pruebas de los 20 kilómetros como en la de 50. A partir de los Juegos de Atlanta en 1996, destacaron nombres como Mikhail Shchennikov, Ilya Markov, Vladimir Andreyev, Denis Nizhegorodov o el mismo Borchin.
La mayoría de ellos fue imbatible en las pruebas europeas o en los mundiales de atletismo, en la década del noventa; y en general en las pruebas atléticas es la disciplina en la que más ha despuntado.
Precisamente Jefferson Pérez superó a uno de los más destacados y favoritos para la prueba en los Juegos Olímpicos de 1996: Ilya Markov.
El deportista ruso llegaba como uno de los favoritos y Pérez era prácticamente un desconocido para el resto; sin embargo, el atleta consiguió la victoria para dar a Ecuador su primera medalla olímpica.
La historia de la marcha rusa se ve ahora salpicada por una trama de dopaje que involucraría a varios deportistas, que dejarán atrás una estela de triunfos y de récords.