Solo la implementación del Videoarbitraje (VAR) en Ecuador costará más que la organización de los 158 partidos que se disputarán en la Superliga Femenina 2020.

Para este año la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF)  destinará $ 205.135 para el desarrollo de la Superliga Femenina, mientras que para la implementación del VAR se invertirán $ 320.000.

Incluso la organización del campeonato femenino tiene una reducción en relación a lo que se invirtió en 2019. Para esta edición se gastarán $ 20.760 menos.

Es decir, la organización de un solo juego de la Superliga Femenina de 2020 costará cerca de los $ 1.300. 

Otro de los torneos que es organizado por la FEF es la Copa Ecuador masculina, que según el presupuesto presentado en el Congreso Ordinario 2020, tendrá un costo de organización de $ 3’374.940.

Dos tipos de contratos
Los 18 equipos que participarán de la Superliga Femenina del Ecuador no están obligados a pagar sueldos a todas sus jugadoras. 

Según el artículo 23 del reglamento del torneo nacional, los clubes pueden inscribir hasta 15 jugadoras -mínimo son 20- como aficionadas.

Es decir, todos los clubes deben pagar salarios a las jugadoras que firmaron contratos como profesionales y también a las extranjeras.

Justamente esta es una de las luchas de las futbolistas de Ecuador que sueñan con recibir un salario digno que les permita vivir del fútbol

Parte de esa lucha se dio en 2014 cuando la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (Fifpro) comenzó a desarrollar un marco específico que permita defender los derechos laborales de las jugadoras.

Iván Hurtado, presidente de la Agremiación de Futbolistas del Ecuador (AFE), le reveló a este Diario que el año pasado el representante de Fifpro para América sostuvo una reunión con futbolistas de país para tratar este tema en Guayaquil.

En agosto de 2019 las jugadoras de la selección de Estados Unidos advirtieron a su federación que irían a juicio si no se trabaja por equiparar los sueldos que reciben ellas en relación a los hombres.

Molly Levinson, vocera de las jugadoras, reveló que la fecha tope para que se cumplan sus exigencias será luego de los Juegos Olímpicos.

Esta selección ya había demandado a su federación en 2016 por discriminación salarial y ganó el caso en los tribunales de ese país.

Una jugadora, que pidió la reserva de su nombre, reveló que existen compañeras que firmaron contratos como amateurs y que solo actúan por amor al deporte, aunque reconoce que los equipos brindan todas las facilidades.

Angie Ramos, futbolista colombiana de los registros del Quito FC -y que el año pasado jugó en U. Católica- explica que en su país todos los equipos pagan salarios a su plantilla, pero que a diferencia de Ecuador el torneo solo dura dos meses.

Uno de los pioneros en el pago de sueldos fue Ñañas, en 2019. El promedio salarial fue de un sueldo básico y además afiliaron a sus jugadoras a la Seguridad Social.

Otro club que pagó sueldos a la mayoría de sus jugadoras fue Deportivo Cuenca -campeón actual-. El año pasado las morlacas se reforzaron con 10 nuevas jugadoras, muchas de ellas dejaron el equipo esta temporada.

Fernanda Vásconez, propietaria del club, reconoce que el fútbol femenino del país pasa por una transición del amateurismo al profesionalismo, pero se esperanza con que el pago de los salarios a todas las jugadoras se convierta en una práctica común.

Hurtado considera que el cambio para que el fútbol femenino se haga profesional “no sucederá de la noche a la mañana”, pero que el organismo está vigilante de que se cumplan los derechos laborales de cada futbolista.

Incluso reveló que este año una jugadora extranjera que vive varios años en el país se acercó a la AFE porque un club de Guayaquil no estaba reconociendo los términos del contrato. Finalmente, la agremiación gestionó y la futbolista arregló su problema.

Solo dos equipos inscribieron
La Superliga Femenina del Ecuador se retrasará una semana debido a que solo dos clubes -de 18- lograron inscribir correctamente a sus plantillas de jugadoras.

Carlos Galarza, titular de la Comisión de Fútbol Femenino del Ecuador, le explicó a Diario EL TELÉGRAFO que varios clubes recién se están familiarizando con el sistema Comet, una aplicación necesaria para completar la inscripción de las plantillas.

“Están conociendo el sistema Comet y no han podido inscribir a las jugadoras (...) Hemos querido postergar una semana para que todas jueguen con su carnet y con plantillas completas, ya que da mejor espectáculo”.

El Comet (Sistema Experto de Registro y de Gestión de Competiciones), según lo define su coordinador en Ecuador, Remo Gambetta, es un software avanzado avalado por la FIFA para la gestión de campeonatos.

Según el artículo 23 del Reglamento de la Superliga Femenina del Ecuador 2020, los contratos e inscripciones tanto para jugadoras aficionadas como profesionales deberán remitir en el Sistema Comet. (I)