En China se excluye a quienes nacieron bajo los signos de Virgo, Leo y Libra
Cada vez que una empresa decide contratar a un nuevo trabajador toma en cuenta su experiencia laboral, su formación académica y los idiomas que domina. Son parámetros que los Departamentos de Recursos Humanos analizan a la hora de decidir si una persona se integra o no a una organización.
En China, sin embargo, hay muchas compañías que han dejado de lado estas consideraciones. Prefieren dejarse guiar por los signos zodiacales que corresponden a los potenciales candidatos. Es un hecho que resulta insólito, sobre todo, porque en este país es el horóscopo chino es el que manda y no el occidental. Pero hay razones para creer que algo está cambiando en esta gran nación.
De acuerdo con el diario South China Morning hay una serie de estereotipos relacionados con el zodiaco occidental que son considerados por los departamentos de recursos humanos. Se cree que los nacidos bajo los signos de Virgo, Leo y Libra son menos persistentes, intensos e, incluso, fastidiosos e indecisos.
Mientras que quienes pertenecen a los signos de Géminis, Piscis y Acuario tienen, según este criterio, fama de ser buenos trabajadores. Los nacidos bajo el signo de Piscis —advierte este diario al referirse a los parámetros que toman en cuenta las empresas— son amistosos, creativos y descomplicados. El diario recoge el testimonio de varios jóvenes que aseguran haber cumplido con el perfil requerido y, aun así, no fueron aceptados. Ellos afirman que su signo zodiacal se convirtió en el único obstáculo para que los contraten. En la oferta de trabajo, publicada en uno de los periódicos, se señala, con claridad: “Estamos buscando a un Géminis, un Piscis o un Acuario”.
El año chino tiene su propio zodíaco que nada tiene que ver con el nuestro, porque se compone de 12 representaciones de animales que influyen durante un año. De acuerdo con la tradición china, cada animal, con sus características positivas y sus debilidades, ejerce una influencia sobre los nacidos en su año. No solo hay que tener en cuenta al animal, sino el elemento que le corresponde. Al contrario que en Occidente, donde rige el calendario gregoriano, China y otros países asiáticos, como Corea, Japón o Vietnam, utilizan el calendario lunar, cuyo fin de año oscila entre finales de enero y mediados de febrero.
Esta costumbre milenaria se rige por un almanaque astrológico que, al tener su origen en el calendario lunar, provoca que el primer día de cada año varíe siempre entre finales de enero y mediados de febrero y reciba también el nombre de la Fiesta de la Primavera.
A la medianoche, los chinos se toman las calles para saludar la llegada del nuevo año con fuegos artificiales. Aunque los chinos se rigen por este calendario, cada vez está ganando mayor influencia la caracterización que suele hacerse en Occidente respecto a los clásicos signos zodiacales. Además, en esta nación asiática, cada vez son más numerosas las páginas web que cuentan con su propio canal de predicciones y consejos, basados en los signos zodiacales.
Otro artículo publicado por el diario South China Morning ha revelado la ausencia de leyes que protejan frente a la discriminación y desigualdad en el trabajo. Esto vuelve todavía más difícil para los posibles perjudicados demandar a los empleadores por haberles descartado, de forma injustificada, para un puesto de trabajo. De hecho, en este país, ya se habla de la insólita discriminación zodiacal.
Ante esta noticia, muchos jóvenes reaccionaron indignados y se comenzó a hablar de lo que hace algún tiempo parece estar ocurriendo en China, uno de los países más supersticiosos del mundo. El problema radica en que esas interpretaciones no obedecen a las características específicas de cada cual, ya que en la astrología occidental no es tanto el signo solar el que determina, sino el ascendente, y más aún, una serie de aspectos y configuraciones personales, que solamente se conocen mediante una Carta Natal.
Así pues vemos que una persona nacida bajo el signo de Géminis, que según la definición del signo tiende a ser conversadora, si tiene como ascendente a Capricornio se mostrará reservada. De la misma manera influye la posición de la Luna, Venus, las conjunciones, oposiciones y todos los aspectos que existen en su Carta Natal.