Según un informe sobre salud bucodental, elaborado la Organización Mundial de la Salud (OMS), casi la mitad de la población mundial sufre enfermedades en la boca o en los dientes. A decir del mismo informe, se han presentado 1.000 millones de nuevos pacientes en las últimas tres décadas

Pero más allá de las cifras que se presentan, una de las enfermedades bucales que más llama la atención es la que podría estar relacionada con la salud mental; se trata de  la enfermedad periodontal, que es una afectación a las encías y puede lesionar la mandíbula.

Recientes investigaciones muestra un vínculo claro entre estas dos: la salud bucal y la salud mental de los pacientes. La doctora ecuatoriana Paula Vargas, odontóloga especialista en rehabilitación oral, explica que “la enfermedad periodontal, o enfermedad de las encías es la que mayor daño puede causar o puede afectar otros sistemas”. Y añade ejemplos: 

"Cuando alguien no tiene una salud dental adecuada y sus dientes se han visto afectados o simplemente no los tiene, reduce su interés por relacionarse con otras personas al no estar gustoso con su imagen. O por ejemplo, quien no tiene dientes es más propenso a preferir carbohidratos por ser blandos, lo que a su vez ocasiona aumento de peso y pérdida de estado físico", detalla vargas. 

Relación con el Alzheimer

Según la revista «Science Advances», se ha descubierto mediante pruebas basadas en el ADN que las bacterias que provocan la enfermdad de las encías, enfermedad periodontal o gingivitis (Porphyromonas gingivalis), son tan potentes que pueden pasar de la boca al cerebro creando una proteína que destruye las células nerviosas de éste, provocando así las frecuentes pérdidas de memoria que dan paso al Alzheimer. 

Sin embargo la bacteria no es causante del Alzheimer, la Porphyromonas gingivalis no provoca la enfermedad mental per se; su presencia puede llegar a provocar los inicios de la enfermedad, pero puede tratarse a tiempo para evitar el deterioro cerebral que sí es lo que provoca el Alzheimer. En cualquier caso, esta bacteria sí es un acelerante de la enfermedad.

No solo eso, según explica la doctora Vargas la enfermedad periodontal podría también afectar el embarazo, estar relacionada con la diabetes, incluso estar ligado al cáncer.

Lo más riesgoso es que “(la enfermedad de las encías) es una enfermedad silenciosa, el paciente solo no la podría detectar, excepto porque podría sentir algo de mal aliento, o algo de enrojecimiento en sus dientes, nada más. Es obligación del odontólogo explicarle que presenta enfermedad periodontal, que por cierto es una enfermedad multifactorial, inflamatoria, que no tiene cura y que lo único que se puede ayudar es a que el paciente haga un mantenimiento adecuado de sus encías, para evitar que se manifiesten los síntomas y signos de esta enfermedad” puntualiza la doctora Vargas.