Desde que iniciaron las manifestaciones el pasado 13 de junio del 2022, son varias las denuncias sobre actos violentos que han puesto en duda el verdadero fin de las protestas, el último de ellos, el ataque a convoy que custodiaba tanqueras de combustible que cobró la vida de un militar y dejó otros 12 uniformados heridos entre policías y militares.

Este caso provocó la suspensión, por parte del Ejecutivo, del diálogo que había iniciado entre el Gobierno Nacional y la dirigencia de la Conaie.

En estos ya 16 días de paralizaciones, tanto en redes sociales como en medios de comunicación, se han compartido imágenes que evidencian ataques hacia la propiedad pública como privada.

Tal es el caso de lo ocurrido, en Quito, en el edificio de la Fiscalía General del Estado que fue atacado en dos ocasiones. La primera vez ocurrió la mañana del 21 de junio cuando manifestantes lanzaron palos y piedras al inmueble y destruyeron la puerta principal, ese mismo día también intentaron ingresar al edificio de flagrancia.

La segunda ocasión ocurrió el día siguiente, el 22 de junio, en videos se observa cómo los agresores ingresaron a la edificación a causar destrozos y a sustraerse documentación, "que luego fue incinerada públicamente", confirmó la FGE en un comunicado.

Otro de los edificios públicos atacados fue el de la Contraloría General del Estado, la tarde del jueves 23 de junio, personas que participaban de las protestas intentaron ingresar a las instalaciones del edificio que fue reconstruido tras el ataque por manifestantes en octubre de 2019.

Así también, se ha registrado ataques aún más violentos en los que, incluso, se ha registrado pérdidas humanas. Uno de estos ataques ocurrió el pasado jueves 23 de junio en San Antonio de Pichincha, al norte de Quito, en donde se incineraron vehículos militares y una persona perdió la vida. Hecho que las autoridades lo atribuyeron a bandas organizadas de la zona mezclados con manifestantes.

Otra de las ciudades en donde se registraron actos violentos fue en Puyo, provincia de Pastaza, quienes participaban de las protestas quemaron una Unidad de Policía Comunitaria, un patrullero y vehículos particulares tras la muerte de un comunero, hecho que las autoridades anunciaron que se realizarán las investigaciones necesarias para esclarecer el hecho.

A esto se suman los ataques a trabajadores de la comunicación que ha derivado en destrucción de herramientas de trabajo como agresiones físicas a reporteros mientras realizaban las coberturas periodísticas de las manifestaciones. Los ataques a elementos de la policía nacional y militares y la muerte de dos personas debido a la obstaculización de vías en el país.

También te puede interesar: 

#LéaloEnET. El Hospital Vicente Corral de Cuenca tiene problemas para abastecer de oxígeno a sus pacientes, por las movilizaciones que impiden llegar el tanquero: https://t.co/X2kgOKEumV pic.twitter.com/GCAUsrJvZk

— El Telégrafo Ecuador (@el_telegrafo) June 28, 2022