Más de 13,4 millones de documentos de los despachos de abogados Appleby (Bermuda) y Asiaciti Trust (Singapur), y 19 registros mercantiles revelaron de nuevo cómo opera la industria ‘offshore’ bajo el título de “Paradise Papers”. Así se denominó a la investigación periodística basada en una filtración múltiple. Y accedieron a los registros mercantiles de 19 jurisdicciones: Antigua y Barbuda, Aruba, Bahamas, Barbados, Bermudas, Islas Caimán, Dominica, Granada, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, Isla de San Vicente y Trinidad y Tobago (Caribe); Islas Cook, Islas Marshall, Samoa y Vanuatu (Oceanía); Malta (Europa), Líbano (Oriente Próximo) y Labuán, territorio federal de Malasia (Asia). La documentación fue obtenida por el diario alemán Süddeutsche Zeitung y compartida con ICIJ, El Confidencial y La Sexta en España y otros 94 medios internacionales, entre ellos The New York Times, Univisión, The Guardian, BBC, Le Monde y La Nación de Argentina. En total, más de 380 periodistas de 67 países investigaron durante un año 1,4 terabytes de información. La nueva investigación sobre paraísos fiscales, que tendría mayor impacto que los Panama Papers, salpicó a varios líderes mundiales. Entre los 127 implicados se destacan la reina Isabel II de Inglaterra, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos; el yerno de Donald Trump, Jared Kushner; y los cantantes Bono y Madonna. La investigación abarca un período de 70 años (1950-2016) y deja al descubierto cómo los ultrarricos invierten en secreto vastas cantidades de dinero en paraísos fiscales. Las revelaciones divulgadas ayer serían solo una parte de las publicaciones que expondrán los arreglos fiscales y financieros de cientos de  personas y compañías mencionadas en los documentos. La investigación revela cómo políticos, multinacionales, celebridades e individuos con mucho dinero usan complejas estructuras como fideicomisos, fundaciones y empresas fantasma para proteger su dinero de los funcionarios fiscales o esconder sus negocios detrás de un velo de secretismo. Pierre Omidyar, George Soros, Paul Allen, Blairo Borges Maggi, Sheldon Adelson, Noor al-Hussein (reina de Jordania) son algunos de los nombres implicados en los Paradise Papers. Cuando el centro comercial Ausra abrió sus puertas en la pequeña ciudad lituana de Utena, a 100 kilómetros de la capital, Vilnius, ninguno de sus empleados  imaginaría que estaban trabajando para una estrella del rock: Paul David Hewson, más conocido como Bono, líder de la banda U2. Su nombre se escondía detrás de una sociedad registrada en Malta. Las autoridades fiscales acaban de abrir una investigación para analizar el posible fraude fiscal cometido por el artista irlandés. Mientras, cerca de $ 13 millones del dinero privado de la reina Isabel eran invertidos en fondos en Islas Caimán y Bermudas por el Ducado de Lancaster, que le proporciona un ingreso a la monarca y maneja inversiones de su patrimonio privado superior a $ 650 millones. No hay nada ilegal en las inversiones y ninguna sugerencia de que la Reina evada impuestos, pero surgen preguntas sobre por qué la monarca está invirtiendo en fondos offshore. En la lista también consta Wilbur Ross, quien ayudó a que Donald Trump evitara la bancarrota en la década de 1990 y que fue recompensado con el puesto de secretario de Comercio en su administración. Los documentos revelan que Ross ha conservado intereses en una compañía que gana anualmente millones de dólares transportando petróleo y gas para una empresa rusa que cuenta entre sus inversionistas al supuesto yerno de Vladimir Putin y dos hombres sujetos a sanciones por parte de EE.UU. El señalamiento vuelve a plantear preguntas acerca de la conexión rusa del equipo de Donald Trump. Su presidencia ha estado marcada por alegaciones de que los rusos se coludieron para afectar el resultado de las elecciones estadounidenses del año pasado y que el mandatario  califica de “noticias falsas”. También consta Juan Manuel Santos, presidente de Colombia, que ganó el premio Nobel de la Paz 2016 por sus esfuerzos para acabar con el conflicto armado que asolaba su país. El mandatario ocupó antes las carteras ministeriales de Comercio Exterior, Hacienda y Defensa. El registro mercantil de Barbados, apunta la investigación, señala que Santos fue director de Global Tuition & Education Insurance Corporation, una aseguradora exenta de carga fiscal, mientras fue ministro de Hacienda. Además consta como director de la aseguradora de Barbados, Nova Holding Company Limited, entre abril y mayo de 2000. Ambas empresas de Barbados son accionistas mayoritarias de Global Education Group Colombia S. A., dedicada a financiar los gastos educativos de colombianos en el exterior. Sobre ello, Santos indicó que fue invitado por inversionistas y empresarios a crear una  solución de financiamiento y preparación de las familias para asumir los costos universitarios de sus hijos. “Participé hasta antes de asumir como ministro de Hacienda en el Gobierno de Andrés Pastrana. Desconozco por qué aparezco como miembro de la junta dos años después. Me imagino que se demoraron en registrar oficialmente los cambios”. (I)