Agencia EFE

Autoridades mexicanas investigan el asesinato de una familia en Puebla, en el centro del país, que pudo ser víctima de bandas dedicadas al robo de combustible, dijeron hoy fuentes policiales.

Los cadáveres de las cuatro personas de una misma familia fueron hallados envueltos en cobijas en un barranco cerca de la presa de Valsequillo, a las afueras de la ciudad de Puebla, capital del estado homónimo.

La Fiscalía local informó que los cuerpos podrían ser de los miembros de una familia que huyó del oriental estado de Veracruz debido a las amenazas de los grupos del crimen organizado.

Uno de los integrantes de la familia era trabajador de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Veracruz y presuntamente tenía vínculos con la delincuencia en relación con la sustracción ilegal de combustible de los ductos de la empresa estatal, indicó un comunicado oficial.

Los cuerpos hallados en estado de putrefacción corresponden a una mujer y un hombre de entre 45 y 50 años de edad, y dos jóvenes de entre 18 y 20 años, todos miembros de la misma familia, según las autoridades.

En el transcurso de este año, las autoridades mexicanas han encontrado en Puebla y Veracruz millones de litros de combustible robado por bandas que también se dedican al secuestro.

Este mismo año, Pemex informó al Congreso que el robo de combustible en México va en aumento y es una fuente de ingresos para el crimen organizado trasnacional.

En 2011 el robo de combustible en México alcanzó los 6,8 millones de barriles, según un informe de Pemex.