Una multitud reclama un referéndum independentista en Cataluña (Galería)
Cientos de miles de independentistas vestidos con los colores amarillo y rojo de la bandera catalana formaron este jueves una inmensa V en Barcelona para exigir una consulta soberanista que choca con la oposición de Madrid.
A las 17:14 locales, en recuerdo de la caída de Barcelona en 1714 en manos de las tropas de Felipe V, quedó formada la gran V de once kilómetros por centanas de miles de personas que ocuparon dos céntricas avenidas barcelonesas.
En el vértice, en la confluencia de ambas avenidas, una joven depositó simbólicamente un voto en una urna, mientras resonaban las notas de un coro con una canción compuesta para la ocasión titulada Ahora es la hora, en medio de los aplausos de los presentes y el ondear de esteladas, la bandera catalana independentista con su estrella blanca en un triángulo azul sobre los colores rojo y amarillo.
"Desde pequeña, gracias a mi familia, me he sentido independentista y no habría nada que me hiciera más ilusión que mi primer voto fuera por la independencia de Cataluña", dijo Laura Sánchez Lora, una joven que cumplirá 16 años, el 9 de noviembre, día previsto para la consulta de autodeterminación.
"No es sólo por cuestión sentimental. Ahora más que nunca, Cataluña necesita un estado que defienda su lengua, su cultura y su economía", añadió.
Más de medio millón de personas se habían inscrito, según los organizadores, en esta manifestación bajo el lema Llenemos las calles para llenar las urnas.
En 2012, una inmensa manifestación en Barcelona precipitó la puesta en marcha del proceso de autodeterminación. En 2013, una cadena humana independentista de 400 kilómetros forzó al gobierno catalán a fijar la fecha de la votación en el 9 de noviembre.
El inmovilismo del gobierno central parece haber dado alas al independentismo en Cataluña de 7,5 millones de habitantes que genera una quinta parte de la riqueza española.
El desencuentro se inició en 2010, cuando el Tribunal Constitucional privó a esta región - que tiene amplias cotas de autogobierno en educación, sanidad y seguridad -, de su estatus de nación incluido en un estatuto de autonomía regional aprobado en 2006.
Dos años después, la división se acentuó cuando el gobierno central negó una mejor financiación a esta región muy afectada por la crisis.