Siria: Sigue violenta represión; la UE amplía las sanciones
Al menos cuatro personas murieron y decenas resultaron heridas hoy, en la ofensiva del Ejército sirio contra las ciudades de Hama (centro), Deir el Zur y Albu Kamal (este).
El domingo, un ataque militar en Hama ya causó la muerte de más de cien personas. El poder intenta desde hace varias semanas someter esa ciudad rebelde situada a 210 km al norte de Damasco, donde se han llevado a cabo varias manifestaciones contra el régimen del presidente Bashar al Asad.
Este lunes, la Unión Europea (UE) congeló los activos de 5 nuevos sirios vinculados con la represión violenta de las revueltas en Siria, a quienes también se prohibirá viajar a territorio comunitario.
Estas cinco personas, cuyos nombres se conocerán cuando mañana la decisión sea publicada en el Diario Oficial de la UE, se suman a la treintena que ya habían sido sancionadas anteriormente, entre las que figura el líder Bachar al Asad.
El aprobado este lunes es el cuarto paquete de sanciones contra el régimen de Damasco adoptado por la UE en respuesta a los ataques contra la población por parte de las autoridades.
La jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, lamentó en un comunicado que el régimen sirio siga optando por esa vía y que "los arrestos masivos, la violencia y los asesinatos de civiles hayan continuado e incluso aumentado".
"Estos muestra que los líderes sirios no desean implementar las reformas prometidas en respuesta a las demandas legítimas del pueblo", señaló Ashton, que condenó los últimos ataques.
La diplomática británica subrayó que la UE "continuará con su actual política, incluyendo sanciones contra aquellos responsables o asociados a la represión violenta".
En tanto que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) descartó planificar una intervención en Siria, similar a la que realiza en Libia, pese a los reportes sobre la sangrienta represión ejercida por el gobierno de Damasco.
El secretario general de la organización, Anders Fogh Rasmussen, explicó que, pese a los informes que hablan de cientos de muertos en manifestaciones antigubernamentales y la consiguiente condena internacional, las condiciones son diferentes.
Desde mediados de marzo pasado, Siria es escenario de revueltas populares contra el Gobierno, en las que han muerto más de 1.500 civiles y cerca de 400 soldados y efectivos de las fuerzas de seguridad, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.