El Ejército ucraniano anunció este lunes que esperaba al cese total de los disparos de los separatistas prorrusos antes de retirar las armas pesadas del frente en el este de Ucrania, un aspecto clave de los acuerdos de Minsk.

"Puesto que siguen los disparos sobre las posiciones ucranianas, aún no se puede hablar de la retirada de las armas", declaró Vladislav Seleznev, portavoz del Estado Mayor del Ejército de Kiev.

Seleznev añadió que sus tropas estaban dispuestas a retirar las armas pesadas en cuanto cesen los disparos durante un día completo.

Los acuerdos firmados el 12 de febrero en Minsk preveían la entrada en vigor de un alto el fuego, a partir del 15 de febrero, y la retirada de las armas pesadas del frente, tan solo 48 horas después.

Sin embargo, la tregua se ignoró en numerosas ocasiones, y los rebeldes tomaron incluso la ciudad estratégica de Debaltsevo en pleno alto el fuego.  

El Ejército ucraniano indicó este lunes que los enfrentamientos se redujeron de forma considerable durante la madrugada, aunque se produjeron choques aislados, sobre todo alrededor del puerto de la ciudad de Mariupol, en el sur del frente.

Muchos ucranianos temen que, tras la toma de Debaltsevo, los rebeldes intenten ahora conquistar esta última ciudad del este ucraniano que sigue en manos del ejército ucraniano.

Los separatistas y las fuerzas de Kiev aseguraron este domingo que habían alcanzado un acuerdo para retirar las armas. Pero mientras los rebeldes se mostraban dispuestos a hacerlo a partir del martes, Kiev insistía en la necesidad de comenzar el mismo domingo.