Grecia "hace todo lo que puede" para recibir dignamente a los migrantes, aseguró el jueves ante la Asamblea General de la ONU su primer ministro Alexis Tsipras, criticando a aquellos que quieren "construir muros ca vez más altos" para frenar ese flujo.

En su primer discurso en la gran cita anual de la ONU, Tsipras recordó que más de 300.000 personas, sobre todo llegadas de Siria, Irak y Afganistán, transitaron por Grecia desde enero en su ruta hacia el norte de Europa.

"En colaboración con la Unión Europea y otras organizaciones internacionales, hacemos todo lo que podemos para administrar este flujo de manera humana y eficaz", afirmó.

"La población griega ha demostrado solidaridad entregando alimentos y refugio a los refugiados", agregó.

En una referencia implícita a Hungría, criticó a aquellos para quienes "la única manera de enfrentar este desafío es construir muros cada vez más altos".

Ante la llegada de cientos de miles de refugiados, Hungría instaló una alambrada de 175 kilómetros a lo largo de su frontera con Serbia y ha comenzado a cerrar también los 41 kilómetros de su frontera verde -no bordeada por el río Drava- con Croacia.

"No debemos olvidar que muchos de nuestros ancestros eran refugiados y migrantes", dijo Tsipras.

"No dejemos que  el racismo y la xenofobia destruyan nuestros valores comunes", concluyó. (I)