Trump: "EE.UU. necesita fronteras fuertes y controles estrictos ahora"
Estados Unidos necesita "fronteras fuertes" y "controles estrictos", declaró Donald Trump este domingo en su cuenta de Twitter, en una aparente reacción al revés judicial impuesto a su decreto sobre la inmigración por una jueza estadounidense.
"Nuestro país necesita fronteras fuertes y controles estrictos AHORA", escribió.
"Miren lo que pasa en Europa y, de hecho, en el mundo -¡un caos horrible!", añadió el presidente, fiel a la rutina establecida recientemente de comentar la actualidad de la víspera desde su cuenta personal de Twitter.
"Los cristianos en el Medio Oriente han sido ejecutados en gran número. ¡No podemos permitir que este horror continúe!", añadió.
Su reacción parece haber sido provocada por la cobertura del tema por el The New York Times, al cual consagra el primer tuit de la mañana, en el que califica a este diario de referencia de "FAKE NEWS" (noticias falsas), sugiriendo que alguien lo compre "para hacerlo funcionar correctamente o enterrarlo dignamente".
Varias organizaciones, entre ellas la poderosa Unión estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), interpusieron una demanda judicial el sábado contra el decreto promulgado un día antes por el mandatario, logrando que la justicia lo bloqueara en parte.
El decreto suspende la acogida de refugiados musulmanes durante 120 días, así como el ingreso durante 90 días de ciudadanos de Irán, Irak, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen, mientras se revisan los criterios de admisión.
Su aplicación desde la noche del viernes tomó por sorpresa a viajeros que ya habían abordado sus vuelos o estaban listos para abordar.
La jueza federal de Nueva York Ann Donnelly impidió al Gobierno expulsar a esos pasajeros tras una audiencia de urgencia realizada en la noche del sábado.
El Departamento de Seguridad Interior dijo que "acatará las decisiones judiciales", lo que se presume que incluye esta sentencia.
A pesar de la decisión judicial, cientos de personas se manifestaron pacíficamente en el aeropuerto John F. Kennedy Airport de Nueva York.
"La gente está preparada para oponerse a esto", dijo David Gaddis, de 43 años. "No es sorprendente que la gente se movilice. Cada día que [Trump] está en su despacho, hay una emergencia nacional".
En otros grandes aeropuertos, como Washington, Chicago, Mineápolis, Denver, Los Ángeles, San Francisco y Dallas también hubo concurridas protestas.
Donnelly ordenó al Gobierno que facilite listas con todos los detenidos en aeropuertos estadounidenses desde la entrada en vigor de la medida.
Una jueza federal de Virginia anunció una decisión similar que alcanza a los pasajeros del aeropuerto de Dulles, cerca de Washington DC, dijo el diario The Charlotte Observer.
Our country needs strong borders and extreme vetting, NOW. Look what is happening all over Europe and, indeed, the world - a horrible mess!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 29, 2017
"Bienvenidos"
Las organizaciones presentaron la demanda este sábado por la mañana, tras la detención en la noche del viernes de dos iraquíes en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York, pese a que contaban con documentación en regla.
Uno de ellos trabajó para el Gobierno estadounidense en Irak durante 10 años y el otro vino a Estados Unidos a reunirse con su esposa, que trabaja para una empresa contratista estadounidense, señaló la demanda.
Los representantes demócratas de Nueva York en el Congreso, Jerry Nadler y Nydia Velasquez, se unieron a la protesta en el estacionamiento del JFK y negociaron todo el día con la policía aeroportuaria.
Obtuvieron la liberación de uno de los iraquíes, Hameed Khalid Darweesh, que trabajó para empresas estadounidenses y en el consulado en Erbil; los manifestantes lo recibieron al grito de "¡bienvenido a casa!", "¡los musulmanes son bienvenidos!, ¡ni odio, ni miedo!".
Larga batalla
Esta movilización y este primer fallo judicial auguran una larga batalla entre los defensores de los inmigrantes y el Gobierno de Trump.
"Es la primera salva dentro de una larga batalla frente a los tribunales", consideró Michael Kagan, especialista en derecho de la inmigración de la Universidad de Nevada.
"Hubo muchas especulaciones sobre lo que Trump realmente quiso decir, si los tecnócratas del Gobierno lo iban a moderar (...) parece que está haciendo literalmente lo que dijo que iba a hacer", añadió.
Según el consejero de Trump Rudy Giuliani, el presidente inicialmente pidió un decreto para "prohibir a musulmanes" la entrada a Estados Unidos y solicitó al exalcalde de Nueva York que le mostrara "la manera para hacerlo legalmente",
"Cuando lo mencionó por primera vez dijo 'prohibición a musulmanes'", explicó Giuliani al canal de televisión Fox News el sábado por la noche, indicando que la elección de esos siete países se debió a que son "áreas del mundo que suponen un peligro" para Washington. (I)