De la mano con su narrativa “América Primero”, el presidente de  Estados Unidos, Donald Trump, solicitó este miércoles 11 de julio a los líderes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), en Bruselas, que dupliquen sus compromisos de gastos de defensa a  4% del Producto Interno Bruto (PIB). El anuncio lo hizo horas después de lanzar una diatriba sobre Alemania.

En una reunión previa con Jens Stoltenberg, secretario general de la Alianza Atlántica, Trump acusó a Berlín de ser cautiva de Moscú por su dependencia del gas ruso -entre el 60% y 70%-.

No obstante, la canciller Angela Merkel defendió que Alemania es un país libre e independiente que decide sin injerencias ajenas.
Sin mencionar al presidente estadounidense, Merkel recordó que Alemania es el segundo país de la OTAN con más tropas en misiones y presencia “muy fuerte” en Afganistán, donde los aliados intervinieron tras el ataque del 11 de septiembre de 2001 (11-S).

“Nosotros también defendemos los intereses de EE.UU.”, enfatizó. Agregó que Alemania  aumenta sus gastos militares y que en 2025 será el 40% superior a 2014, cuanto se fijó el objetivo del 2% del PIB.

Las contribuciones directas sirven para financiar el “presupuesto civil” de la Alianza ($ 291 millones en 2018), que cubre el costo de funcionamiento del cuartel general de la organización transatlántica en Bruselas.

Pero también los 29 aliados contribuyen al “presupuesto militar”, de $ 1.550 millones en 2018, que financia la estructura de mando de la OTAN. La contribución se realiza en base al tamaño de su economía.

La cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) concluirá este jueves 12, después Trump visitará Reino Unido y el lunes se reunirá con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, en Helsinki.

“Francamente Putin puede ser el más fácil de todos -OTAN-. ¿Quién lo habría pensado?”, indicó Trump a la prensa antes de partir hacia la cumbre en Bruselas.

El aumento a 4% del PIB
De acuerdo con el diario The Washington Post, aunque Trump se unió a otros líderes de la OTAN para aprobar un amplio conjunto de planes para reforzar las defensas contra Rusia y el terrorismo, el mandatario se quejó de que Europa aproveche su apoyo militar para el continente.

Asimismo, instó a sus homólogos en una sesión privada para aumentar sustancialmente un objetivo de gastos de defensa en el cual muchos le quedan corto.

Ni siquiera EE.UU., que gasta más dinero en defensa que cualquier otra nación en el mundo, cumple con la nueva meta de gastar anualmente el 4% del Producto Interno Bruto (PIB) de las naciones. En 2017 Washington gastó el 3,6%.

No es la primera vez que el presidente republicano arremete contra Europa. En su discurso del 25 de junio en su país afirmó falsamente que EE.UU. era responsable del 90% de los gastos, cuando no pasa el 22%.  Nadie entiende cómo llegó a esta cifra.

Según un reportaje de la ABC, en la lista de aportes le siguen Alemania (14,65%), Francia (10,63%) y Gran Bretaña (9,84%). Sin embargo, hasta 13 aliados pagan menos de 1%.

La mayoría de este rubro son pequeñas naciones comunistas que se unieron a la Alianza tras el colapso de la Unión Soviética y la desintegración de Yugoslavia.

Desde sus comienzos, la OTAN fue una alianza militar defensiva destinada a disuadir cualquier ataque proveniente de la Unión Soviética.

Los dos acuerdos logrados
Jens Stoltenberg indicó que la mayoría de los países miembros planean aumentar sus gastos en defensa hasta 2024. Se estiman $ 266.000 millones adicionales. También se acordó la iniciativa 30-30-30-30. “Significa que hasta 2020 los aliados tendrán 30 batallones mecanizados, 30 escuadrones aéreos y 30 navíos de combate que estén listos en 30 días o menos.

En la cumbre se acordó crear dos nuevos mandos de la OTAN; en el Atlántico en Norfolk (Virginia, EE.UU.) y para apoyo y logística en Ulm (Alemania). Y se crearán unidades de defensa cibernética y de “lucha de las amenazas híbridas”.  (I)