Tras acuerdo cesa motín policial, pero indígenas confrontan al presidente Morales en La Paz
En un ambiente político más distendido por la solución de un motín policial, cientos de indígenas llegaron a La Paz tras dos meses de caminata para exigir la anulación definitiva de un proyecto vial que atraviesa la Amazonía boliviana, en un nuevo reto para el presidente Evo Morales.
El servicio de seguridad pública, compuesto por 35 mil efectivos, estaba ayer totalmente reanudado en todo el país luego de un acuerdo salarial firmado con el gobierno después de seis días de motín y agitación callejera de policías rasos, muchos de ellos enmascarados, que provocaron violencia.
Desmontado el motín policial, el foco de protesta giró ahora hacia la marcha indígena, que tuvo este miércoles un caluroso recibimiento en La Paz, especialmente por las clases medias que se concentraron a lo largo de su recorrido ofreciéndoles alimento y abrigo.
Cuando los indígenas intentaban manifestarse en la Plaza de Armas, lugar que representa el poder político en Bolivia porque alberga los edificios del Gobierno y el Congreso, fueron reprimidos con gases lacrimógenos por la policía.