Theresa May busca consenso con otros partidos tras debilitado mandato
La primera ministra británica, Theresa May, busca lograr un consenso con otros partidos políticos tras un debilitado mandato y crecientes especulaciones por un complot interno dentro del Partido Conservador para reemplazarla de su cargo al frente del Gobierno.
May llamó a los partidos políticos a ayudarla a crear políticas para una Gran Bretaña ‘post-Brexit’.
En una ponencia a un año desde que asumió su cargo en Downing Street y en medio de especulaciones por un posible complot conservador para reemplazarla del poder, la Primera Ministra intenta conseguir apoyo tras perder la mayoría absoluta en las elecciones generales del pasado 8 de junio.
“Mi determinación para cambiar Gran Bretaña sigue firme”, explicó May en su discurso, que será leído públicamente este martes en Londres.
“Les pido a los partidos que presenten sus opiniones e ideas acerca de cómo podemos resolver estos desafíos como país”, agregó.
Según May, en momentos tan críticos para la nación “podemos ser tímidos o resueltos”.
“Podemos caminar sobre seguro o avanzar con renovado coraje y vigor, justificando nuestras ideas y valores, y desafiando a nuestros oponentes a contribuir, y no sólo criticar.
En todo lo que hacemos, trabajaremos con un propósito inquebrantable para construir una Gran Bretaña mejor y más justa que queremos todos”, señaló en el discurso.
A pesar de haber perdido la mayoría parlamentaria tras los comicios del mes pasado, May insistió que el camino que trazó “es el correcto”.
Fuentes oficiales de Downing Street indicaron que el “tono conciliador” de la Primera Ministra “refleja su pragmatismo acerca de la nueva configuración parlamentaria”.
La jefa del Partido Conservador se vio obligada a conformar un Gobierno de minorías con el oscuro Partido Democrático Unionista (DUP) de Irlanda del Norte, tras perder la mayoría de 17 bancas parlamentarias en la Cámara de los Comunes.
May precisará del apoyo del opositor Laborismo para implementar el ‘Brexit’, incluida la aprobación de la llamada "Great Repeal Bill" (Ley de la Gran Derogación), que busca trasladar la legislación comunitaria al derecho británico a fin de terminar con la "supremacía" de la Unión Europea (UE), una vez que la desconexión con el bloque sea efectiva.
Dicho proyecto de ley será publicado el jueves, cuando comenzará a ser debatido en el Parlamento.
Los parlamentarios opuestos al ‘Brexit duro’ planean una serie de enmiendas a la Ley de la Gran Derogación, entre ellas las pedidas por el Laborismo, que quiere más salvaguardas para el medio ambiente y los derechos de los trabajadores.
En todo caso, May quiere escuchar las ideas de otros partidos, no sólo sobre el ‘Brexit’, sino también sobre áreas de política nacional como de salud, educación y justicia.
Sin embargo, Andrew Gwynne, coordinador principal de la campaña laborista y ministro en la sombra de Jeremy Corbyn, afirmó que Theresa May “aceptó finalmente que su Gobierno ya no tiene ideas propias”.
“Como resultado, tiene que rogarle ahora al Laborismo por nuevas ideas. Esto es otra evidencia más acerca de que esta Administración no puede gobernar el país”, señaló el político laborista.
El anuncio de la Primera Ministra se conoce días después que la prensa británica citó a fuentes del Partido Conservador sobre crecientes pedidos para reemplazar a May al frente del Gobierno luego de los desastrosos resultados electorales para los “tories”.
Varios reportes periodísticos indicaron que grupos cercanos al secretario para el ‘Brexit’, David Davis, están a favor de reemplazar a la mandataria e incluso habrían evaluado hacer circular una carta para que May ponga una fecha exacta a su salida.
En caso de una contienda interna dentro del Partido Conservador, Davis, que en 2005 perdió frente a David Cameron para convertirse en jefe de su agrupación, podría salir ahora favorecido.
Por su parte, Grant Shapps, ex presidente de los conservadores, dijo que la Primera Ministra necesita cambiar su estilo de liderazgo “si quiere sobrevivir otro año al frente del Gobierno”.
En un artículo de opinión publicado por el dominical Sun on Sunday, Shapps dijo que la campaña electoral de May fue “disfuncional, arrogante y corrosiva”.
“Durante el segundo año de su mandato, Theresa May tendrá que operar un modelo completamente diferente para permanecer en el poder. Deberá abrir las puertas de Downing Street para dar la bienvenida a ideas innovadoras, escuchar a los empresarios y aprovechar mejor el talento amplio de su partido en el Parlamento”, agregó el político conservador.
En tanto, un sondeo de la consultora YouGov para la cadena Sky News concluyó que Theresa May no sólo está siendo cada vez más impopular en el Reino Unido, sino también en el resto de Europa.
Del total de los 8.000 europeos consultados, un 62% tiene una opinión negativa de May.
La Primera Ministra británica también es muy mal vista en Francia, Dinamarca, Suecia, Finlandia y Noruega.
De los 1.161 británicos entrevistados, un 59% dijo tener una opinión negativa de May, frente al 32% que expresó su aprobación para la mandataria. (I)