Tabaré prioriza la agenda social en Uruguay
El sobrio médico oncólogo Tabaré Vázquez asume hoy su segunda presidencia en Uruguay con desafíos económicos y sociales por delante y la complicada herencia de llevar la marihuana a las farmacias, medida aprobada por el carismático e informal mandatario saliente José Mujica, quien regresa a ocupar una curul en el Senado.
Este médico socialista de 75 años, abanderado de la lucha antitabaco, ganó con un 53% de los votos las elecciones de noviembre pasado y vuelve al poder en un país que tras una década de gobierno de izquierda ostenta una economía saludable, que lleva 12 años de crecimiento, una tasa de desempleo en mínimos históricos y una notable reducción de los niveles de pobreza.
De todas formas, en un momento en el que sus vecinos y principales socios comerciales, Argentina y Brasil, se desaceleran, a diferencia de su primer gobierno, Vázquez (2015-2010) deberá enfrentar un probable enlentecimiento y contener un creciente déficit fiscal.
“Parte del crecimiento económico de los últimos 2 años probablemente se dio a expensas de un deterioro de algunos equilibrios macroeconómicos”, advirtió esta semana el economista Pablo Rosselli, de la consultora Deloitte, al local canal 10.
Según el economista, “en los próximos 2 ó 3 años no deberíamos ver ningún aumento del gasto público en términos reales para permitir una reducción del déficit” y para moderar la inflación - que se ubica por encima del rango meta de entre 3% y 7%- “es necesario una moderación del ritmo de aumento de los salarios”, que de la mano de la izquierda crecieron fuertemente.
Por su parte, Vázquez ha asegurado que su gobierno “no será más de lo mismo” y prometió atacar “temas vertebrales de la agenda social del país” como inseguridad pública, educación, salud e infraestructura, áreas en las que el saliente Mujica ha admitido que no logró los avances deseados.
Aunque integran la misma coalición de izquierda, el Frente Amplio, Vázquez también se desmarcó del estilo informal y espontáneo de Mujica, y dejó en claro que las cosas serán diferentes a partir de hoy, cuando asuma por segunda vez.
“Cuando haya un tema necesario de comunicar a la población o lo considere lo haremos oportunamente. No cualquier tema ni en cualquier momento ni tampoco en cualquier lugar”, advirtió Vázquez en diciembre a periodistas, que lo esperaron en la puerta de su consultorio médico. Muy diferente del mandatario saliente, que habla sobre todos los temas, a toda hora y en todo lugar.
Como es habitual, la toma de posesión tendrá como escenario el Congreso y contará con la presencia de los principales líderes latinoamericanos, entre ellos el presidente de Ecuador, Rafael Correa.