Suben a 238 los muertos en el accidente minero en Turquía
El balance de víctimas del accidente en una mina del oeste de Turquía subió a 238 muertos, anunció el miércoles en Soma el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, cuyo gobierno está acusado de descuidar la seguridad en la industria minera.
Erdogan, que decretó un duelo nacional de tres días, anuló un viaje previsto a Albania para trasladarse a Soma, el lugar de la tragedia, ubicado a 100 km de la ciudad de Izmir, y prometió una investigación oficial sobre el accidente.
El balance de víctimas es provisional porque, según Erdogan, unos 120 mineros siguen atrapados en las galerías de la mina, con pocas posibilidades de sobrevivir.
El drama conmocionó al país y dio lugar a manifestaciones de estudiantes en Ankara y Estambul, que fueron dispersadas por la policía con gases lacrimógenos.
El papa Francisco llamó hoy a los fieles católicos a rezar por los mineros, mientras que el presidente francés François Hollande ofreció la ayuda de Francia al gobierno turco.
"La esperanza de encontrar sobrevivientes en la mina se desvanece, pero vamos a continuar hasta el final", dijo el miércoles en Soma, en distrito de Manisa, el ministro de Energía y Recursos Naturales, Taner Yildiz.
Poco antes, Yildiz indicó que 363 mineros habían podido ser rescatados.
En total, 787 trabajadores se encontraban en la mina en el momento de la explosión, que se produjo en la tarde del martes debido, al parecer, a una falla eléctrica en un transformador.
La oposición acusó el miércoles de negligencia al gobierno y los dirigentes sindicales exigieron la dimisión de los ministros de Trabajo y Energía. También anunciaron una huelga general para mañana.
Hace tres semana el parlamento, donde el gobierno tiene mayoría, rechazó tres mociones de la oposición para crear una comisión que investigue las condiciones de seguridad en las minas.
El ministerio turco de Trabajo y Seguridad Social afirmó que la mina fue inspeccionada por última vez el 17 de marzo pasado y que respetaba las normas en vigor.
Por su parte, la Fiscalía de la región puso en marcha una investigación judicial sobre las razones del accidente.
Hoy, cientos de socorristas seguían trabajando frenéticamente para rescatar a los mineros. Durante la mañana sólo una decena de mineros lograron ser extraídos del socavón, la mayoría de ellos muertos, salvo uno que llevaba una máscara de oxígeno.
A su alrededor, cientos de colegas y familiares esperaban angustiados noticias de sus allegados.
El accidente de Soma es una de la peores tragedias industriales de la historia de Turquía.
Este distrito, que tiene alrededor de 100.000 habitantes, es uno de los principales centros del país de extracción de lignito (carbón fósil), la principal actividad de la región.