Sede de Gobierno de Noruega, blanco de atentado mortal
Un atentado con coche bomba cerca de la sede del gobierno en Oslo y un tiroteo en un campamento de verano del partido laborista, al que tenía previsto acudir el primer ministro, Jens Stoltenberg, causaron ayer 17 muertos y quince heridos, en un ataque terrorista sin precedentes en Noruega.
Horas después, el grupo yihadista Ansar Al Jihad Al Alami emitió un comunicado en el que reivindicó los ataques terroristas ocurridos en el país escandinavo, reveló el diario estadounidense The New York Times.
“Los yihadistas de Ansar al-Jihad al-Alami reclamaron la responsabilidad del ataque según un analista del instituto de estudios sobre el terrorismo CNA de Estados Unidos”, indicó el periódico, que señala que el atentado fue una respuesta a la presencia noruega en Afganistán. La Unión Europea (UE), la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) y el Gobierno de Estados Unidos condenaron los atentados.
Los dos ataques perpetrados causaron 17 muertos, pero el balance puede aumentar, declaró un funcionario de la policía de Oslo, mientras que el ministro de Justicia, Knut Storberget, confirmó que hay un hombre detenido y que es de nacionalidad noruega. Los uniformados informaron además que en la explosión ocurrida en pleno corazón de la capital noruega está la oficina del Primer Ministro, quien no se hallaba en ella en ese momento.
Casi en el mismo momento, un hombre disfrazado de policía abrió fuego durante un mitin de las juventudes laboristas en Utoeya, una isla en la periferia de Oslo, informó NRK.
La policía confirmó el incidente en la isla, donde se celebra un campamento de verano del gobernante partido laborista y al que tenía previsto acudir el Primer Ministro. Además las fuerzas de seguridad temen que haya explosivos colocados en la zona. Uno de los participantes declaró al diario Varden que había visto al menos cuatro muertos.
Según NRK, que cita a testigos, al menos cinco personas fueron alcanzadas por varias balas. La policía cree que los dos ataques están vinculados.
El primer ministro noruego hizo declaraciones a la prensa para mostrar que estaba sano y salvo tras el atentado y calificó la situación de “muy grave”. Además, convocó a una reunión de crisis por la noche, tras los dos cruentos ataques.
Al parecer es la primera vez que se comete un atentado con bomba en Noruega, país miembro de la OTAN implicado en las operaciones en Afganistán y Libia. El atentado fue perpetrado por la tarde en pleno corazón del barrio donde se encuentran varios ministerios y la redacción del periódico VG.
En las imágenes de las televisiones noruegas se veía la sede de las oficinas del primer ministro y otros edificios completamente desfigurados y las aceras llenas de cristales, así como una humareda y numerosas ambulancias amarillas.
“Vi que las ventanas del edificio del VG y de la sede del gobierno estallaron. Hay personas ensangrentadas en la calle”, declaró una periodista de la radio estatal NRK desde el lugar de los hechos.
“Hay cristales por todas partes. Es el caos total. Las ventanas de todos los edificios de los alrededores saltaron por los aires, añadió la periodista de NRK Ingunn Andersen, que inicialmente pensó en un terremoto. Un portavoz de la policía llamó a los habitantes de Oslo a evitar las grandes concentraciones y permanecer en casa.
El barrio fue acordonado y perros adiestrados por la policía peinaban el lugar en busca de otros explosivos mientras los bomberos luchaban contra las llamas en medio de un paisaje desolador.
El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Anders Fogh Rasmussen, condenó enérgicamente el “atroz” atentado en Oslo y transmitió sus condolencias al Gobierno noruego, a los noruegos y a las familias de las víctimas.